El matrimonio entre personas del mismo sexo gana apoyo en Australia
Los diferentes proyectos de ley de matrimonio entre personas del mismo sexo presentados ante el Parlamento de Australia han conseguido ya un apoyo histórico por parte de los ciudadanos. Si hace días recogíamos como el proyecto presentado ante el Senado era el más apoyado de la historia del país en términos de sugerencias favorables recibidas (más de 45.000), ahora conocemos el resultado de la encuesta online promovida por la Cámara de Representantes. De las 218.048 respuestas recibidas, el 58% se ha expresado a favor.
Dos son las iniciativas de matrimonio entre personas del mismo sexo presentadas en la Cámara de Representantes, una promovida por verdes e independientes y otra por un diputado laborista. Ya antes otro proyecto había comenzado a tramitarse en el Senado, promovido también por los verdes. Se espera que el proceso parlamentario se resuelva, en un sentido u otro, a lo largo de los próximos meses.
A día de hoy no es posible hacer pronósticos sobre lo que puede suceder, especialmente si como se espera la oposición liberal decide finalmente permitir el voto en conciencia a sus representantes. Como adelantábamos en diciembre, no pocos representantes liberales se han sentido molestos con la posición expresada entonces por su lider, Tony Abbott, partidario de oponerse en bloque a la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo. Semanas después, y a falta de confirmación oficial, la prensa adelantó que Abbott había admitido en privado que un número indeterminado de diputados liberales está a favor del matrimonio igualitario y se mostraría dispuesto a permitir el voto en conciencia. La hermana de Abbott, por cierto, sorprendía saliendo públicamente del armario hace pocas semanas.
De la posición que finalmente adopten los liberales moderados podría depender su aprobación o no, dado que los representantes laboristas están divididos, y ello pese a que que el reciente congreso laborista se pronunció a favor. El congreso laborista, sin embargo, también admitió la propuesta de la primera ministra Julia Gillard (que se opone a la aprobación) de dar libertad de voto a sus representantes. Gillard, laborista, se opone a la aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo, aunque recientemente ha admitido que antes o después esta resulta “inevitable”. Todo ello sin tener en cuenta que las encuestas realizadas en los últimos meses arrojan sistemáticamente un apoyo mayoritario al matrimonio igualitario entre la población australiana y que además hay en marcha iniciativas no solo a nivel federal, también a nivel de los diferentes estados.
Desde la organización Australian Marriage Equality, que ya expresó su satisfacción por el récord alcanzado por el proceso de consultas en el Senado, han vuelto manifestar su entusiasmo por el apoyo recibido en la Cámara de Representantes. «Ninguna otra propuesta legislativa ha motivado que tantos australianos participen en una encuesta parlamentaria», ha declarado su presidente Alex Greenwich.
El Presidente de la Cámara, acusado por un empleado gay de acoso
En este contexto, los medios de comunicación se hacen eco de la acusación al speaker o Presidente de la Cámara de Representantes de Australia, Peter Slipper, de haber acosado a James Ashby, trabajador de su oficina desde diciembre. Según afirma Ashby, de 33 años y abiertamente gay, Slipper le contrató a sabiendas de su orientación sexual con el propósito de entablar con él una relación. Entre otras acusaciones, el joven sostiene que Slipper, de 62 años, le pidió en una ocasión ducharse con la puerta abierta. Las acusaciones de Ashby, que Slipper ha negado, han sido reveladas por los medios del magnate australiano Rupert Murdoch -de conocida ideología conservadora- que sostienen además que el speaker ya se enfrentó a una situación parecida hace varios años.
Peter Slipper es en la actualidad un diputado independiente, tras abandonar el Partido Liberal hace unos meses cuando los laboristas lo propusieron como speaker tras la dimisión del anterior. Dada la débil mayoría parlamentaria del Gobierno laborista, que carece de mayoría absoluta en la Cámara de Representantes y depende del apoyo de varios diputados de formaciones minoritarias, un escándalo que costara el puesto a Slipper podría poner en aprietos para el Gobierno laborista. Estaremos atentos a los acontecimientos, muy especialmente a como ello afectara al proceso de discusión del matrimonio igualitario.
La polémica gilipollas y homófoba de la semana:
http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2012/04/24/futbol/1335251360.html
El beso entre el ecuatoriano Christian Benítez y el internacional argentino Vicente durante el partido del domingo pasado frente al Puebla llevará a la Comisión Disciplinaria a pedir al América no más festejos de «picoretes» entre jugadores.
«Se le mandará una carta al América porque no queremos que esto sea un ejemplo para nadie. No es un festejo apropiado para el público», dijo hoy el titular de la Comisión, Alfonso Sabater. Y agregó: «No es la imagen a los niños que queremos dar. Creo que eso no lo podemos tomar como un buen ejemplo».
Dexter, aquí hace años ya que prohibieron a los futbolistas exhibir su torso desnudo. Tienen que llevar una camiseta debajo para poder «destaparse». Pa mear y no echar gota. Así que no me extraña que haya habido desmayos y más por un pico.
Los plazos se van cumpliendo, todo parece indicar que el lunes comenzará el debate sobre la cuestión en la cámara baja australiana:
http://www.sbs.com.au/news/article/1660083/Church-leaders-scaremongering-Greens
Y sin salir de Oceanía, en la vecina Nueva Zelanda se han presentado dos iniciativas legislativas en el mismo sentido:
http://news.msn.co.nz/nationalnews/8484129/two-gay-marriage-bills-in-the-ballot-box