California estudia una prohibición parcial de las «terapias» reparadoras de la homosexualidad
Un Comité del Senado de California ha dado su visto bueno a un importante proyecto de ley que protegerá a niños y adolescentes de las peligrosas «terapias» reparadoras de la homosexualidad. De ser finalmente aprobada, la ley prohibirá aplicar este tipo de procedimientos a menores de 18 años.
«Tener una orientación sexual lesbiana, gay o bisexual no es una enfermedad. No existe evidencia científica de que ningún tipo de terapia se haya mostrado realmente efectiva para cambiar la orientación sexual de una persona. Los esfuerzos para cambiar la orientación sexual pueden ser además peligrosos. Los riesgos incluyen (aunque no solo) depresión, ansiedad y comportamiento autodestructivo. Asociaciones médicas y psicológicas que se oponen a este tipo de tratamientos incluyen la Asociación Médica Americana, la Asociación Americana de Psicología, la Asociación Americana de Psiquiatría, La Asociación Nacional de Trabajadores Sociales, la Asociación Americana de Counseling, la Academia Americana de Pediatría y la Asociación Americana para la Terapia Matrimonial y de Familia«, será el texto que además se deberá presentar a los que soliciten dichos tratamientos en caso de que el proyecto sea finalmente aprobado por la legislatura de California, controlada por los demócratas en sus dos cámaras. Según fuentes próximas al Gobernador, el también demócrata Jerry Brown, este firmará sin problema alguno la ley en caso de llegar a su despacho.
El proyecto de ley (SB 1172), promovido por el senador Ted Lieu y el grupo de defensa de los derechos civiles Equality California, busca proteger a las personas homosexuales o bisexuales que presentan dificultades de aceptación de su propia orientación, un colectivo especialmente vulnerable a las manipulaciones emocionales de los sectores homófobos que insisten en presentar la homosexualidad como una disfunción psicológica que es posible corregir. Como era previsible, el proyecto cuenta con la feroz oposición de organizaciones homófobas como la National Association for the Research and Therapy of Homosexuality (NARTH), una organización que precisamente promueve este tipo de «terapias», y que considera el proyecto un un ataque tanto a la «libertad individual» como a la «libertad religiosa».
Psiquiatra que en su momento las consideró válidas admite su error
Se da la curiosa circunstancia de que entre los textos que ha utilizado NARTH para justificar este tipo de procedimientos se encuentra un artículo publicado en 2001 por el prestigioso psiquiatra Robert Spitzer, que tras revisar una serie de 200 casos de personas que se habían sometido a dichas «terapias» publicó que hasta un 66% de los hombres y un 44% de las mujeres referían haber conseguido una «buena funcionalidad heterosexual«. Para definir esta «buena funcionalidad» se valoraron una serie de criterios. Por ejemplo (y no es broma) que la persona no pensara en alguien de su mismo sexo más del 15% de las veces que se acostaba con alguien de distinto sexo.
El estudio recibió ya entonces fuertes críticas por la metodología utilizada. Ahora, una década después, el propio Robert Spitzer ha admitido que las críticas eran acertadas.
Ya era hora de que las leyes protegieran a los menores de edad LGBT en contra de estos centros «ex gays», pues en los hechos, provocan incertidumbre, angustia, depresión, frustración y suicidio, un desenlace fatal, y no hablemos del desfalco económico que sus clientes y parientes sufren por tratar de «curar» la homosexualidad, misma que la Organización Psiquiátrica Americana y la Organización Mundial de la Salud aclararon que NO es un trastorno y no requiere tratamiento.
Y sobre las protestas de la NARTH… uno de sus líderes, el Sr. George Rekers, fue pillado al regresar de unas vacaciones en Europa junto a un sexo servidor de 20 años en 2010 al que contrató en la página porno RentBoy. Para colmo, se dió a conocer que hace años, Rekers sometió a un niño de 5 años supuestamente «afeminado» a una «terapia» para «prevenir su homosexualidad», la cual no era otra cosa que palizas propinadas por el padre del niño y un sistema draconiano de castigos. Una tortura verdadera. ¿Resultado? El niño creció solitario y terminó suicidándose a los 38 años. ¿La NARTH a esto le llama «un ataque a la libertad»? ¿Libertad de torturar niños o de ser hipócritas? A otro perro con ese hueso…
Lo gracioso del estudio del señor Spitzer es que no hay como medir el pensamiento del «paciente», no sabe si está diciendo la verdad o está mintiendo, esa fue una de las críticas a sus «estudios». Menos mal que pudo darse cuenta de ello, y admitirlo.
Siempre he sido rebelde, pero no salí del armario por voluntad propia sino por un «amigo» (loca mala)que por hacerme daño me dio la libertad.Mi papá,un hombre justo y liberal después de la sorpresa y el llanto de mi madre,me llevó aparte y me dijo,»Mambrú,esta es tu casa y siempre serás mi hijo pero por favor ten cuidado al elegir tus amistades» y a continuación me propuso ir donde un sicólogo,yo me quedé de piedra y le dije: Está bien iré al sicólogo, pero si tú vienes conmigo,y así se hizo y nos fuimos los dos donde el loquero durante dos años pagados por él,de su bolsillo.Aprendimos muchas cosas los dos en ese tiempo,principalmente a ser amigos.Hoy sigo siendo feliz y homosexual,él justo y liberal y el sicólogo ¡Quién sabe!.
En Truth Wins Out encontré este comentario, el cual cito a continuación:
«Estos estudios siempre ignoran la existencia de la bisexualidad. La forma en que funciona es ésta: Supongamos que alguien es 20% buga (heterosexual) y 80% gay. Debido a la ignorancia de la bisexualidad, o la bifobia interiorizada, o la falta de una comunidad bisexual donde estar, ellos se identifican como gays, ya que sus atracciones son en su mayoría gays. Luego sus padres insisten en que «oren para alejar lo gay», o ir por la «cura», o lo que sea. Son presionados y avergonzado hasta que dejen de actuar en sus impulsos gays. Sin embargo, siempre fueron un poco bi, y si la mujer adecuada llega, pueden funcionar sexualmente con ella (probablemente al mismo tiempo fantaseando con hombres). Así que ellos NO han cambiado en absoluto. Siempre fueron bisexuales, y todavía son bisexuales. Son sólo un chico bi con tendencia gay que solamente está actuando en sus impulsos bugas, y que ha sido avergonzado para identificarse como buga. La cantidad de hombres que pasan por estos campamentos («ex gays») y que se suicidan es enorme; ser avergonzado por algo que no se eligió es muy perjudicial:
http://www.youtube.com/watch?v=aDiYeJ_bsQo
Este video desgarrador muestra a ex líderes de Exodus admitiendo que nunca han cambiado a UNA sola persona, que ellos llevaron a la gente al suicidio, y pidiendo disculpas. Los estudios acumulándose demuestran que el ser gay, bisexual y transgénero es biológico y que nosotros nacemos de esa manera. Todo lo que puedes es hacer que una persona gay se convierta en célibe, y que una persona bisexual sólo actúe en sus impulsos bugas. He visto unos pocos videos de personas que dicen que fueron «curados» por estos campamentos y ahora están con mujeres, pero una vez más, sospecho que son personas bisexuales que actúan como bugas.»
Comentario por Estraven — Abril 25, 2012 10:10 pm.