El juez hace pública la pena impuesta a Dharun Ravi, cuya actuación desencadenó el suicidio del joven gay Tyler Clementi
Treinta días de cárcel, trescientas horas de servicio a la comunidad, participación en un programa contra el ciberacoso y una multa de 10.000 dólares. Es la condena que el juez Glenn Berman ha impuesto finalmente a Dharun Ravi, el que fuera compañero de habitación de Tyler Clementi, un joven que se quitó la vida en septiembre de 2010 después de que Ravi lo espiara a través de una webcam y difundiera sus encuentros homosexuales a través de internet. Hace dos meses Ravi fue encontrado culpable, total o parcialmente, de hasta 15 cargos, incluyendo violación de la privacidad e intimidación.
La historia de Tyler Clementi, a diferencia de lo que ocurre con otros adolescentes LGTB que se suicidan, tuvo en su momento gran repercusión mediática. Sucedió en Nueva Jersey (Estados Unidos). Clementi era un joven de 18 años que había conseguido una beca en la Rutgers University gracias a su virtuosismo como violinista. Según los hechos probados (que difieren ligeramente de la versión que inicialmente se dio de la historia) Clementi pidió un día a su compañero que le dejara disfrutar a solas del cuarto. Ravi le concedió el favor, pero lo espió a través de una webcam desde el cuarto de otra compañera, Molly Wei. A través de la cámara vio como Clementi se besada con otro hombre. Ravi, no contento con violar su privacidad, difundió a través de Twitter, mensajes de texto y en persona que había pillado a su compañero “haciéndoselo con otro tío”.
Dos días después, cuando Clementi le pidió de nuevo quedarse a solas, Ravi orientó la webcam hacia su cama e invitó a sus seguidores de Twitter a visualizar lo que estaba sucediendo a través de iChat, un servicio que permite visualizar vídeos. Clementi no pudo aguantar la presión que supuso convertirse en la comidilla de la universidad y finalmente se quitó la vida. Ha quedado probado además que Ravi quiso hacer desaparecer después docenas de tweets y mensajes e intentó convencer a Molly Wei, convertida en testigo de cargo, de que cambiara su versión de lo sucedido.
La defensa de Ravi utilizó diferentes argumentos para rebajar su responsabilidad, desde que había espiado lo que sucedía en su cuarto porque “no se fiaba” de la apariencia del amigo de Clementi hasta que no tenía apenas conocimiento previo de la realidad homosexual. Sin embargo, pese a los esfuerzos de la defensa, el jurado encontró a Ravi culpable, total o parcialmente, de hasta 15 cargos, incluyendo violación de la privacidad de Clementi e intimidación. Una sentencia que podría haberle supuesto hasta 10 años de cárcel e incluso la deportación a su país de origen (Ravi es de nacionalidad india), que al final han quedado en 30 días de cárcel, 300 horas de servicio a la comunidad, la obligatoriedad de participar en iun programa contra el ciberacoso y uma multa de 10.000 dólares que Ravi deberá pagar a una organización de defensa de las víctimas de este tipo de delitos. El juez Berman, encargado de imponer la pena, ha considerado que aunque Ravi cometió un acto de «colosal insensibilidad» no creeo que realmente»odiara a Clementi por ser homosexual.
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Flick
Flick no es más que el "nick" con el que empecé a comentar (y discutir, y razonar...) en dosmanzanas, allá por 2006. Me sabía a poco, por eso decidí colaborar y compartir mi pasión por estar informado. Y aquí sigo.
Pues no sé si le odiaría. Pero que es un corre-ve-y-dile asquerosamente ruin, sí. Sus acciones han traído consecuencias graves para otra persona. Poca pena me parece a mí. Que pague.
¿Treinta días? ¿Es una broma? Si Agatha Christie decía aquello de «Matar es fácil», se ve que con inducir al suicidio y salir casi de rositas ocurre lo mismo. Claro, y no había homofobia por ningún lado. Alucino.
Ante esa sentencia solo me viene a la mente dos palabras: Increible y Vergonzoso.
Decir cualquier otra cosa esta de más. Quizas esas organizaciones deberian recurrir la sentencia a poder ser en otro estado.
Yo coincido con Jay. Increible y vergonzoso.
Increible que lo hayan llevado a juicio(«que se hubiese dedicado a estudiar y buscarse una buena mujer con la que reproducirse»). Y lo vergonzoso es que el juicio haya sido una pantochada que se ha dado una sentencia barata, imagino que para que no digan que no se hizo nada, aunque está claro que esto y nada es lo mismo. ¿Cuando humillar a una persona dejará de ser humor?
Sí pescaito… es que esta mañana no estaba muy iluminada mentalmente y sinceramente fueron las dos palabras que pense una seguida de la otra.
Esta tarde despues de reflexionar un rato sobre el supuesto juicio o la parodia de juicio. Tengo una gran pregunta que hacer a estos señores, lastima que no soy abogado ni intencion… las leyes me aburren hasta el infinito. pero creo que la pregunta va a tiro.
¿Qué hubiera pasado si en lugar de suicidarse Tyler Clementi, hubiera optado por mi opcion, agarrar al Ravi y darle la paliza del siglo? ¿La sentencia habrian sido tambien 30 dias de prision? Lo dudo mucho. Y volvemos a la triste concluision. No les importa que muramos como victimas, pero eso si… sin defendernos.
El juez es tan homófobo como cualquier obispo.
Pendejo hijo de tres mil putas. Le tendrían que haber dado 10 años en cana, por lo que hizo y para que cunda el ejemplo. Clementi está muerto y este forrazo en un año ya se olvidó de todo. La puta madre que los recontra cagó a los jueces de mierda que le dieron esa pena pelotuda a esta basura inmunda sin medio código. Ojalá lo agarre algún loco vengativo y le corte las pelotas, lo filme con una webcam y cuelgue el video en Twitter. La concha de sus putas abuelas.
A ver, un poco de distanciamiento, que a todos nos duele la homofobia y todos tenemos experiencias desgradables y duras… pero me parece que es razonable la condena, y por parte el suicidio del joven que el Ravi este no se esperaría y la condena y el repudio públicos también son parte de una pena que el Ravi este también se hará pagar caro él a sí mismo.
Me gusta ese tipo de combinaciones en las condenas , que todo no sea pena de cárcel, y que haya una parte de la condena que obligue a tomar consciencia de lo que se ha hecho.
Azul, puede ser así como lo planteás vos, pero si este enfermo cretino hubiese descargado toda su inconmensurable mala leche sobre un muchacho negro o judío en vez de sobre uno gay, le hubiesen dado 10 añitos y mandado de vuelta a la concha de su madre después de cumplir la pena. No lo dudes un segundo.
Yo solo me pregunto una cosa: ¿ Dónde está la chica que le ayudó a difundir esas imágenes, dónde están los cómplices, porque no pudo hacerlo solo, tras la primera grabación, debieron intervenir, nadie hizo nada. Y el centro en que estudiaba, no pudo hacer nada entre la primera y la segunda grabación?
Dicho esto, lo que no puede hacerse es culpar de la muerte de una persona que se ha suicidado a otra. La habrá alentado, facilitado, favorecido, enaltecido o como queráis llamarlo, pero no es directamente responsable de su muerte. Lo que sí es condenable es su invasión de la privacidad, y peor aún, el uso público de esas imágenes ilegales para humillar a una persona socialmente. Eso no creo que sólo merezca una pena de 1 mes de cárcel; pero en todo caso, no es un crimen penal, sino moral y contra el honor. Y el castigo pasa por otro lado, por el lado civil, al menos por el conocimiento que yo tengo de la Justicia. En ese sentido, la idea de deportarlo sí que me parece venganza y contraproducente. Debería sufrir el rechazo público unánime por sus actos y tener consecuencias, para empezar, de la Universidad donde estudia. Según leo en la noticia en inglés, no mostró signo de arrepentimiento, ni se levantó en el momento de escuchar la sentencia. Ver eso, y decir que no lo hizo con inquina y que no había odio es discutible. Hay que tener prejuicios para difundir imágenes de la intimidad de alguien a toda la Facultad, es un acto que va más allá de la broma de jóvenes. Yo le hubiera gastado exactamente la misma jugada, nada de darle el placer de ver que me afecta tanto, ni quitarme la vida.Darle a probar de su propia medicina más una buena demanda civil hubiera sido lo ideal.