California: nueva derrota judicial de los opositores al matrimonio igualitario, a los que ya solo queda recurrir al Supremo
Importante sentencia la que se ha conocido este martes en Estados Unidos. El noveno circuito de la Corte federal de Apelaciones, con sede en San Francisco, ha rechazado el recurso que los contrarios al matrimonio entre personas del mismo sexo interpusieron contra la decisión de esa Corte, que el pasado febrero confirmaba la inconstitucionalidad de la Proposición 8. A los contrarios al matrimonio igualitario ya solo les queda una puerta: el mismísimo Tribunal Supremo de los Estados Unidos.
La historia de este proceso es larga y compleja, aunque intentaremos resumirla. En agosto de 2010 el juez federal Vaughn Walker declaró contraria a la Constitución de Estados Unidos la Proposición 8, la enmienda a la Constitución de California que prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo aprobada en referéndum en noviembre de 2008. La sentencia, cuya aplicación hubiera supuesto la reanudación de las bodas entre personas del mismo sexo en California, fue cautelarmente suspendida por la Corte de Apelaciones de San Francisco, ante la cual los grupos defensores de la Proposición 8 apelaron. Tras una disputa jurídica sobre si tenían derecho a hacerlo (el estado de California, que era en realidad la parte demandada, había decidido no apelar y dar por buena la sentencia de Walker) la Corte Suprema de California se lo permitió.
Los recurrentes habían intentado además esgrimir la condición de gay del propio Walker (un juez conservador al que la demanda le correspondió por turno) con el objetivo de invalidar su sentencia. Un intento de recusación que fue desestimado por otro juez federal, James Wore, al considerar que la mera condición homosexual no invalida a un juez para decidir sobre derechos LGTB.
Finalmente, el panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones de San Francisco al que correspondía examinar el recurso se pronunció y ratificó la sentencia de Walker. Los contrarios al matrimonio igualitario intentaron que la Corte reexaminara el caso con una composición más amplia (once jueces) algo que ha sido ahora rechazado.
¿Llegará el caso al Tribunal Supremo de Estados Unidos?
Los contrarios al matrimonio igualitario en California disponen ahora de noventa días para decidir si recurren al Tribunal Supremo de Estados Unidos. A priori, resulta peligroso, dado que un pronunciamiento claro del Tribunal Supremo contrario al matrimonio igualitario podría tener un efecto devastador de alcance nacional. Sin embargo, según los analistas, lo más probable es que el Supremo no entre en la discusión de fondo, y se limite a valorar una cuestión formal: si efectivamente puede considerarse inconstitucional que un estado retire a una minoría un derecho fundamental que ese mismo estado le había reconocido previamente sin que medie una razón legítima para ello (recordemos que durante varios meses gays y lesbianas sí pudieron casarse en California, derecho que les fue reconocido por la Corte Suprema del estado, y de hecho a día de hoy hay 18.000 parejas casadas cuyo matrimonio sigue siendo válido). Ello restringiría los efectos de la sentencia al estado de California, lo que permitiría que el Tribunal Supremo ratificase la sentencia de Walker sin que ello supusiera un pronunciamiento sobre el matrimonio igualitario en sí.
De hecho, el Tribunal Supremo puede optar por no aceptar ni siquiera a trámite el recurso, al considerar que los tribunales federales de menor rango ya han dejado el asunto suficientemente claro. Estaremos muy atentos a lo que sucede en próximas semanas.
Puedes descargar esta última sentencia de la Corte de Apelaciones pinchando aquí. Y la sentencia original del juez Walker, pinchando aquí.