Denuncian el acoso sufrido por homosexuales en el Líbano
Diversos activistas por los derechos humanos vienen denunciando las humillaciones y torturas que muchos gays sufren en el Líbano: hombres sospechosos de ser homosexuales son llevados ante un médico y sometidos a exámenes humillantes con el pretexto de determinar su orientación sexual.
El abogado y activista Nizar Saghieh organizó una conferencia para denunciar estos “exámenes de la vergüenza”, que al parecer comenzaron cuando tres hombres fueron arrestados en las cercanías de la residencia de un líder político del país. Los detenidos fueron interrogados y la policía concluyó que no se trataba de espías o conspiradores, pero uno de ellos fue considerado afeminado y los tres fueron sometidos acto seguido a exámenes anales para ver si eran homosexuales. En dichos exámenes, tan absurdos como crueles, los médicos buscan restos de semen y toman fotos para estudiar la forma de la cavidad anal. Saghieh también ha denunciado hace unos días, en una conferencia el 22 de junio, exámenes similares para determinar si una mujer es “virgen o una prostituta”.
La organización Human Rights Watch ya denunció abusos similares en Egipto, pero el Líbano venía siendo considerado un país más tolerante que sus vecinos. En cualquier caso las relaciones homosexuales son formalmente ilegales en el Líbano, descritas como “actos sexuales contra natura” por el artículo 534 del Código Penal y castigadas con penas de hasta un año en prisión. Artículo por cierto heredado de la legislación vigente en la potencia colonial de la época, la Francia del Régimen de Vichy, colaboracionista con los nazis.
Pese a la homofobia aún reinante en el Líbano, las denuncias de estos “exámenes de la vergüenza” han provocado numerosas reacciones de indignación, sobre todo en las redes sociales (las autoridades por su parte permanecen en silencio). Esperemos que dicha indignación contribuya a avivar el debate sobre la derogación del artículo 534. De hecho existen movimientos que buscan la secularización del estado libanés (en la actualidad las cuotas de poder se reparten siguiendo un criterio religioso, y no existe, por mencionar sólo un ejemplo, el matrimonio civil) y que cuentan con el apoyo de activistas LGTB.