El bloqueo institucional impide al Senado de Nueva York votar el matrimonio entre personas del mismo sexo
El bloqueo institucional que vive en estos momentos el Senado del estado de Nueva York, desencadenado por la decisión de dos senadores demócratas de retirar su apoyo al anterior líder de la mayoría y unirse a los republicanos para elegir a un nuevo líder (para más detalles, recomendamos releer la entrada que publicamos hace dos semanas) impide que tenga lugar la votación pendiente para aprobar (o no) el matrimonio entre personas del mismo sexo en ese estado.
El cambio de líder, en un principio, parecía ser una buena noticia para los partidarios de votar la ley, que ya ha sido aprobada por la otra cámara legislativa del estado, la Asamblea de Nueva York. El antiguo líder, pese a ser demócrata, se mostraba reacio a llevar el asunto a votación a no ser que tuviera absolutamente asegurada su aprobación por el pleno, cosa que a día de hoy parece imposible saber de antemano (contaba para ello con el apoyo de varios senadores demócratas contrarios al matrimonio homosexual). Sin embargo, el «golpe de timón» ha desencadenado en la práctica una situación de bloqueo institucional, ya que el bloque demócrata (sin sus dos «trásfugas») se niega a aceptar la legitimidad del nuevo liderazgo republicano.
El Gobernador del estado, David Paterson, dado que el Senado agotó esta semana su actual periodo de sesiones, ha hecho uso de sus atribuciones especiales para convocar esta semana una sesión extraordinaria del Senado con el objeto de votar las normativas pendientes, incluyendo la ley de matrimonio. Lo cierto es que ni anteayer martes ni ayer miércoles la sesión ha podido celebrarse. El martes el bloque republicano intentó llegar antes para ocupar su nueva posición en la mesa del Senado, pero los demócratas se les adelantaron y les bloquearon el acceso. Finalmente los republicanos pudieron acceder pero ambos bloques celebraron dos sesiones «simultáneas» sin resultado alguno. Ayer miércoles parece que fueron los propios demócratas los que se rebelaron ante el Gobernador, también demócrata, cuestionando su legitimidad para convocar en sesión extraordinaria solamente al Senado y no a la Asamblea, e inmediatamente se marcharon ante las amenazas del Gobernador.
Mientras los políticos de Nueva York ofrecen este lamentable espectáculo, el destino de la ley que permitiría a gays y lesbianas del estado acceder en igualdad de condiciones que sus conciudadanos heterosexuales al matrimonio civil permanece incierto.
¿Qué pasa que el gobierno del estado de Nueva York quiere imitar al gobierno italiano en hacer teatrinos?
Es una pena, Nueva York es demasiado importante simbólicamente.También en numero de habitantes.
Un pequeño apunte: uno de los «tránsfugas» ha regresado al grupo demócrata, así que en la actualidad hay un empate a 31 escaños.