Carta al senador colombiano Roberto Gerlein
Reproducimos a continuación la carta que la Asociación de Ateos y Agnósticos de Bogotá intentará hacer llegar al senador Roberto Gerlein, que hace unos días apelaba a la Biblia y calificaba el sexo entre varones de “sucio, asqueroso, excremental” durante la discusión de un proyecto de ley de matrimonio entre personas del mismo sexo en Colombia.
La carta se le radicará aprovechando la celebración de una besatón de protesta programada este martes en la Plaza de Bolívar, frente al Congreso de Colombia.
Señor: Roberto Gerlein Echeverría
Senador de la República
Reciba un saludo de la Asociación de Ateos y Agnósticos de Bogotá.
El pasado 21 de noviembre, durante el primer debate del proyecto de ley que permitiría el matrimonio igualitario, realizó usted varias declaraciones que han sido de conocimiento de todos los ciudadanos. Tales declaraciones fueron homofóbicas y violaron el laicismo, lo cual nos preocupa en gran manera.
Durante su intervención dijo usted que: A mí sí me gusta la Biblia, bueno les voy a citar el Génesis. La voz del padre, la voz de Dios “Creced y multiplicaos y poblad la Tierra” defendiendo el argumento que la finalidad del matrimonio es la reproducción.
Usted como individuo puede tomar como libro sagrado la Biblia, el Corán, el Popol Vuh, los libros védicos, el Avesta, o el que desee. Pero, llevarlo como argumento a un debate serio, en calidad de senador en un Estado Laico es algo reprochable. Si bien usted lleva 40 años en el Senado, las cosas hoy no son como antes. Desde la Constitución de 1991 Colombia es un Estado Laico, y esto significa no favorecer o promover ningún credo religioso en particular, así como construir un país justo, en el que sus ciudadanos son diversos, en el que los prejuicios religiosos no son parte de la política pública.
Su mención del Génesis bíblico tiene varios inconvenientes que a continuación le mencionaremos:
Primero, el relato de la creación de Adán y Eva, en el que se enmarca la frase del dios Yavhé que usted citó, es tan solo un mito y de hecho, la Iglesia Católica ha reconocido este pasaje como metafórico. Es una narración de los orígenes que nunca ocurrió, porque los seres humanos somos producto de un proceso evolutivo. De esto hay pruebas genéticas, paleontológicas, embriológicas y anatómicas que usted puede encontrar en la web o en cualquier libro de biología.
Segundo, el mismo texto del Génesis, tomado literalmente, engendraría un problema ambiental enorme. El relato dice «Fructificad y multiplicaos; y henchid la tierra y sojuzgadla; y tened dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves de los cielos y sobre todas las bestias que se mueven sobre la tierra». Esta creencia ha generado una concepción en la que el hombre se ha creído dueño de la naturaleza, y la ha sobreexplotado con graves consecuencias ambientales como lo es el cambio climático, la sobrepoblación humana, la hambruna, la extinción de especies silvestres, entre muchos otros problemas.
Dice usted que un mundo sin humanos sería estéril, dejando ver sus ideas antropocéntricas. No señor, este planeta ha estado la mayor parte de su existencia sin nosotros, y la debacle de la biodiversidad se está dando ahora, por nuestra sobrepoblación. Lamentamos que todo un Senador de la República presente un analfabetismo científico tan alto, que sin duda influye en su trabajo como moldeador de las políticas públicas.
La Biblia no puede tomarse como base para un debate serio sobre sexualidad, moralidad, o cualquier otro aspecto, porque además de violar el principio de laicismo contiene una serie de inexactitudes científicas y normas anacrónicas.
El citar la Biblia en un debate del Senado confunde la concepción de pecado con la de delito, lo que para instancias legales, es algo claramente contraproducente en un Estado Laico. Por cierto, le informamos que la Biblia no prohíbe el matrimonio homosexual. Lo que la Biblia prohíbe es que los homosexuales varones vivan, según el libro de Levítico. Debido que usted lleva la Biblia a un debate legal y dice que «le gusta mucho» nos preguntamos, ¿Propondrá un proyecto de ley para imponerle la pena de muerte a los homosexuales como lo estipula Levítico 20: 13? ¿También propondrá la prohibición de comer productos que contengan sangre (Levitico 7:26) o tatuarse (Levítico 19:28)? Según la Biblia la esclavitud está permitida (Éxodo 21: 1-11). ¿Puede ver cómo los derechos humanos son mejores que la Biblia, o desea aún usar la Biblia como fuente argumentativa a la hora de aprobar leyes?
Un ejemplo de laicismo digno de resaltar es el de Mary McAleese, la expresidente de Irlanda, quien es católica y ha apoyado abrir el matrimonio civil a las parejas del mismo sexo. Ella al ser criticada por el cardenal Bernard Law, quien la acusó de ser “muy pobre” como católica, respondió: “No soy una presidente católica. Soy la presidente de Irlanda, donde hay todo tipo de personas, de las cuales soy su presidente. Y se da la circunstancia de que además soy católica”. Eso es respeto por la pluralidad de un país, eso es laicismo y es un ejemplo de separación entre Estado y religiones que le recomendamos seguir.
Por otra parte, nos preocupa su concepción de la finalidad de matrimonio. Lamentamos que el amor no esté dentro de las razones por las cuales, para usted, una pareja de humanos unen sus vidas. Sus declaraciones se enmarcan dentro de un sistema socio-sexual patriarcal y heteronormativo, donde traer descendencia era el fin, y la mujer se convierte en una incubadora humana. Pero señor Gerlein, la sociedad ha cambiado, las parejas del mismo sexo, y de diferente sexo que viven sin querer tener hijos, existen y eso no hace sus vidas «estériles» como usted afirmó. Si siguiéramos su argumento una pareja heterosexual en la que uno o ambos miembros de la pareja fueran estériles no podrían casarse.
Confunde además usted lo natural con lo normal, en términos estadísticos o de aceptación social. Dice usted que la homosexualidad es antinatural. Nada más falso. En centenares de especies se ha documentado la homosexualidad, entre ellas el bonobo, Pan paniscus, que es junto con el chimpancé común las especies vivas más cercanas a nosotros en términos evolutivos. Justamente esa especie utiliza el sexo con fines no reproductivos para mejorar las relaciones sociales de su comunidad.
Ha calificado usted de horror que un par de hombres compartan la cama, por no decir que una vida juntos. ¡Vaya prioridad la que le da usted a los horrores del país!. La discriminación es el verdadero horror. Es increíble que personas con poder e influencia ayuden a perpetuar prejuicios negativos hacía gays y lesbianas, la visión del matrimonio como una factoría de humanos y por ende la visión de la mujer como ser con finalidad reproductiva. Como eco de esto último se nos viene a la mente que usted en 1998 se refirió a Viviane Morales, entonces senadora y compañera suya, como»vagina del Congreso». Estas visiones retrógradas hacen de una persona, por más dinero o poder que tenga, un «sepulcro blanqueado» en cuanto a derechos humanos, para usar una expresión de ese libro que a usted tanto le gusta.
Lamentamos que sus declaraciones contribuyan a mantener el prejuicio y la discriminación hacia un colectivo que históricamente ha sido rechazado. Expresiones como «asqueroso», «excremental» y «sucio» no añaden elementos razonados al debate. Tan sólo son manifestaciones de su prejuicio, revelado en la utilización de la expresión «homosexualismo» y no «homosexualidad». La primera hace referencia a una enfermedad psicológica, que fue algo que se sostuvo desde finales del siglo XIX hasta bien después de mediados del siglo XX. Pero a medida que el conocimiento avanzó se abandonó la patologización de la homosexualidad en los círculos académicos, y se considera hoy ahora como una orientación sexual más. Desconoce usted que el 17 de mayo de 1990, la Organización Mundial de la Salud (OMS) excluyó la homosexualidad de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y otros Problemas de Salud.
Además de estas consideraciones académicas, vale la pena recordarle que lo que se está discutiendo en este proyecto de ley no es su gusto por el sexo gay, sino de la posibilidad que parejas ya existentes tengan garantía plena de sus derechos, que no sigan siendo tratados como ciudadanos de segunda clase. Este paso valientemente lo han dado once países, entre ellos Argentina y España. En estos momentos Uruguay y Francia se aprestan a dar el paso por la igualdad. Ojalá Colombia pueda unirse a la senda de los derechos plenos para todas las parejas sin discriminar por la orientación sexual de sus miembros.
Concordamos con el periodista Felipe Restrepo Pombo cuando al respecto escribió en la revista Semana: «Un Estado no debería anteponer los temas religiosos ni morales al bienestar de todos los ciudadanos. Su tarea es trabajar por la igualdad y asegurarse de que todos tengan las herramientas para realizarse. Los hombres políticos que menosprecian las libertades personales y que rechazan a quienes consideran diferentes tejen un manto de duda sobre su vocación democrática».
Esperamos, señor, que pueda enmendar su camino y pasarse al camino de la libertad, la igualdad, la fraternidad y el respeto activo. Presentar disculpas a la comunidad LGBTI sería un buen primer paso. En caso de no desear apoyar el espíritu democrático e incluyente de la Colombia del siglo XXI su lugar estará junto con aquellos políticos reaccionarios que en el pasado se opusieron al voto femenino, la educación para la mujer, al divorcio, al fin de la esclavitud, a la libertad religiosa, y demás conquistas sociales. Aún está a tiempo.
Atentamente,
Asociación de Ateos y Agnósticos de Bogotá
“Una carta en dosmanzanas” quiere ser una sección abierta, a la que podéis enviar cartas que deseéis que publiquemos en dosmanzanas y con las que queráis dar vuestro punto de vista sobre actualidad, noticias o cualquier otro tema relacionado de una u otra forma con la realidad LGTB. Todas las cartas para ser publicadas deberán ser recibidas en nuestro correo electrónico (Para que no lo confundamos con cualquier otro mail recibido en esta misma dirección, indicad en el asunto: “Una carta a dosmanzanas”).
Dosmanzanas se reserva el derecho a no publicar alguna de las cartas recibidas. Dosmanzanas puede no compartir las opiniones expresadas en las cartas publicadas en esta sección.