Senegal: dos jóvenes agredidos por los padres de uno de ellos al descubirlos manteniendo relaciones homosexuales
La historia es terrible. Dos muchachos senegaleses de Guédiawaye, un suburbio de Dakar, fueron agredidos por los padres de uno de ellos cuando fueron descubiertos manteniendo relaciones sexuales. Los medios senegaleses no han dudado además en hacer públicos sus nombres, en un país en el que mantener relaciones homosexuales es delito.
Mouhamadou Lamine Ndour y Pape Diop se encontraban en casa del primero cuando por sorpresa aparecieron sus padres y los descubrieron, el pasado 27 de diciembre. Los padres agredieron a ambos, sin importarles que uno de ellos fuera su propio hijo, que escapó de su casa y desde entonces permanece en paradero desconocido. Para mayor escarnio, el incidente ha sido recogido y divulgado por los medios de comunicación locales, que además de difundir sus nombres no han dudado en utilizar contra ellos términos ofensivos, describiéndolos como «maricones» y acusándolos de acciones «contra natura» o condenándolos por no reprimir su «naturaleza». Poco importa que sean argumentos contradictorios cuando de expresar el odio homófobo se trata…
Senegal, un país de África occidental de mayoría musulmana, castiga las relaciones homosexuales con hasta cinco años de cárcel y multas que en los casos más extremos pueden llegar hasta los 1.500 euros, cifra exorbitante para un ciudadano senegalés. Precisamente hace ahora dos años nos hacíamos eco de un informe de Human Rights Watch que alertaba del incremento de las agresiones hacia las personas homosexuales en ese país, estimuladas por líderes políticos y religiosos que habrían sido decisivos a la hora de fabricar un clima de brutal violencia homófoba con la connivencia de buena parte de los medios de comunicación. Muchas de las agresiones, detenciones e incluso linchamientos ni siquiera alcanzarían las páginas de la prensa internacional.
Antes de este, el último de los casos conocidos había sido el Tamsir Jupiter Ndiaye, un conocido periodista detenido tras mantener relaciones sexuales con otro hombre al que agredió cuando al parecer este le reclamó dinero a cambio. Ndiaye fue condenado en octubre a cuatro años de cárcel (por mantener relaciones sexuales y por la agresión), mientras que el otro hombre fue condenado a tres años de prisión. Con independencia de otras consideraciones, el caso fue utilizado por medios de comunicación y líderes religiosos para desatar una nueva campaña de odio homófobo.
De las declaraciones del gremio curesco,vease el de la mitra de alcala de henares y demas compis, vienen estos resultados…. en fin q pena
Cuando estuve en Senegal hace varios años, tuvimos un intercambio de opiniones acerca de lo que no podemos entender, del otro pais. Nuestro grupo de mujeres españolas no comprende la poligamia. Nuestros interlocutores senegaleses, el matrimonio gay. Nos explicaron que una pareja gay no tiene espacio en la estructura social senegalesa. De por sí, porque las relaciones homosexuales están mal vistas. Y también porque la familia africana es extensa, lo que significa que los hijos varones tienden a vivir con sus padres, incorporando a su esposa e hijos en el clan familiar. En el caso de una pareja gay ¿en cuál de los dos clanes se incorporarían ambos?
Naturalmente que el problema de fondo es la mala opinión, porque la práctica encontraría la mejor solución para el otro problema.