Nueva derrota de los opositores al matrimonio igualitario en Francia

El CESE (Consejo Económico, Social y Medioambiental en sus siglas en francés) ha rechazado la admisión a trámite de la consulta efectuada por los opuestos al matrimonio igualitario en Francia tras reunir 700.000 firmas. Según la resolución, el único que puede efectuar consultas al Consejo sobre un proyecto de ley en curso es el primer ministro.

El CESE es un organismo consultivo, integrado por representantes de distintos estamentos y organizaciones ciudadanas. Desde 2008 se abrió la posibilidad de que contestara a iniciativas ciudadanas, para lo que se necesitaban 500.000 firmas. El pasado 15 de febrero, los opositores al proyecto de ley de matrimonio igualitario depositaron en la sede del CESE un total de 700.000 firmas que respaldaban su petición de que el organismo opinara sobre dicho proyecto de ley. Pretendían que el dictamen, en caso de ser negativo, paralizara el proceso de aprobación de la ley.

Antes de la resolución, el presidente del CESE Jean-Paul Delevoye ya había advertido que el organismo era incompetente para paralizar un proyecto de ley, e incluso expresó su opinión particular de que la petición ni siquiera podría ser admitida a trámite. Esta opinión indignó a una de las cabecillas de los opuestos a la igualdad LGTB, la cómica Frigide Barjot, que en su cuenta de Twitter proclamaba: “¿Vuestras 708.000 peticiones son inadmisibles? ¡Si ni siquiera se ha planteado la pregunta a la administración del CESE que debe reunirse el martes 26!”.

Efectivamente, el martes 26 de febrero, reunida la administración del CESE encargada de la recepción de las consultas, emitió una resolución que respaldaba la opinión del presidente: “De conformidad con el artículo 69 de la Constitución y el artículo 2 de la Ordenanza de 29 de diciembre 1958 de la Ley Orgánica de Consejo Económico, Social y Medioambiental, la remisión de una consulta al CESE sobre un proyecto de ley es atribución exclusiva del primer ministro. Por lo tanto, no puede ser efectuada por petición ciudadana. El Consejo ha resuelto que la petición para solicitar la opinión del CESE sobre un proyecto de ley no es admisible. Además, se recuerda que la remisión al CESE no puede, a fortiori, tener un efecto suspensivo sobre un procedimiento legislativo en curso”. Sin embargo, la resolución también establece que el CESE someterá a discusión en su Asamblea, a iniciativa propia, una consulta sobre “la evolución contemporánea de la familia y sus implicaciones en materia de políticas públicas”.

Los contrarios al matrimonio igualitario se mostraban contrariados en Twitter: “700.000 peticiones no admitidas, la democracia ciudadana está amordazada”, y alentaban a la participación en la manifestación contra la igualdad de derechos convocada para el 24 de marzo.

Frigide Barjot se queda sin libro

Pero no es esta la única mala noticia para Frigide Barjot, la cómica que encabeza el movimiento que se opone a la igualdad de las personas LGTB en Francia. Su libro, titulado “¡No me toques el sexo!: contra el ‘matrimonio’ gay…”  ha sido retirado de la venta por compartir título principal con una obra anterior del cirujano Gérard Zwang, que trataba sobre las vejaciones efectuadas sobre el sexo de la mujer. Al parecer, la editora de Barjot no tuvo la precaución de consultar si el título de su obra ya había sido utilizado.

Según los datos oficiales, los ejemplares vendidos a la fecha de la retirada del libro asecendían a un total de 800. El precio de cada ejemplar era de 5 euros, y había sido difundido recientemente en la cadena televisiva France 2, en el programa de Laurent Ruquier, que entrevistó a la conocida cómica el pasado mes de enero.