Redada en una tienda gay de Tokio por vender material considerado “obsceno”
La policía metropolitana de Tokio irrumpió el pasado viernes en una tienda gay del distrito de Shinjuku en la capital japonesa, arrestando a sus dos dependientes por tener a la venta libros con desnudos masculinos, considerados “obscenos” según las leyes del país. Ambos se encuentran ya en libertad.
Los agentes detuvieron al encargado y un empleado de Lumiere, un establecimiento situado en el barrio gay de Tokio que vende películas y revistas. El “crimen” que habían cometido es vender los libros del fotógrafo singapurense Leslie Kee, que contienen desnudos frontales masculinos. El código penal japonés prohíbe la distribución, venta o exposición pública de escritos o imágenes obscenas, si bien no define los criterios para calificar un material como tal. En 1999, el Tribunal Supremo del país asiático dictaminó que toda fotografía que muestre los genitales masculinos debía considerarse obscena.
En su defensa, el responsable de la tienda explicó a la policía que el editor de la revista gay Badi había escrito que los libros de Kee no eran ilegales porque se trata de un trabajo artístico. El propio Kee fue arrestado el pasado mes de febrero cuando presentaba su libro en una exposición de Tokio. A los dos días fue puesto en libertad. Las obras del fotógrafo estadounidense Robert Mapplethorpe también han sido censuradas en Japón.
Bueno, esa ley explica por qué los mangas yaoi y hentai casi nunca muestran los genitales de los tíos (o aparecen blanqueados, emborronados o con tiras negras).
Odio las leyes puritanas. ¿Por qué tienen tanto miedo al cuerpo desnudo de la gente? Nadie les obliga a comprar una revista porno y leerla.
Me pregunto qué harán los japos con respecto a los atlas de anatomía humana. Esos libritos tan obscenos que les enseñan con todo detalle a los estudiantes de medicina los genitales de ambos sexos de la especie humana.
También me pregunto si los japos en sus universidades tienen facultades de bellas artes en las cuales trabajen modelos desnudos para las asignaturas de dibujo.
El código penal japonés no deja de ser un cheque en blanco para que los mandones de turno persigan a quien les salga de los kōgans (testículos en japonés)
Oye, y que no sé cómo, pero los medios de comunicación se empeñan erre que erre en mostrarnos a la sociedad japonesa como una de las más avanzadas del mundo….
Será para colocarnos sus cacharritos tecnológicos, porque a la hora de la verdad, en determinados aspectos tienen la mentalidad de épocas bien pretéritas.