La sudafricana Lynne Brown, primera mujer abiertamente lesbiana que forma parte de un gobierno en África
Jacob Zuma, reelegido presidente de Sudáfrica tras la victoria del Congreso Nacional Africano en las elecciones del pasado 7 de mayo, ha nombrado a Lynne Brown, abiertamente lesbiana, nueva ministra de Empresas Públicas. Brown se convierte en la primera persona abiertamente homosexual en formar parte del gobierno de un país africano.
Lynne Brown tiene 52 años, es mestiza y pertenece como Jacob Zuma al Congreso Nacional Africano. No se trata de la primera vez que ocupa un cargo político: ya entre 2008 y 2009 fue jefa del gobierno de la Provincia Occidental del Cabo. Pero su nombramiento como ministra de la República de Sudáfrica -lo que la convierte en la primera persona abiertamente homosexual en el gobierno de un estado africano- es de gran importancia simbólica, especialmente si se tienen en cuenta los antecedentes de Zuma, que hace solo unas pocas semanas se negaba a condenar las legislaciones homófobas aprobadas recientemente por varios países africanos alegando que Sudáfrica “respeta la soberanía de otros países para adoptar sus propias legislaciones”. Zuma ha sido además un claro opositor al matrimonio entre personas del mismo sexo en el pasado, aunque en una entrevista concedida en 2012 se mostraba resignado y reconocía que el matrimonio igualitario en Sudáfrica “está constitucionalmente aceptado. No importa lo que yo pueda opinar”. En efecto, la Constitución de Sudáfrica prohíbe expresamente la discriminación por razones de orientación sexual, lo que en su momento llevó a su Corte Suprema a declarar inconstitucional la prohibición del matrimonio igualitario y forzó su aprobación en 2006.
Por si fuera poco, la primera presidencia de Zuma se caracterizó por el nombramiento en cargos relevantes de personas hostiles a los derechos LGTB y fue criticada por la tardanza en reaccionar ante las espantosas “violaciones correctivas” de mujeres lesbianas que asolan el país. Es por eso que la elección de una mujer como primera persona homosexual en el gobierno supone otro motivo de satisfacción.
Segunda buena noticia desde Sudáfrica en pocos días
La designación de Lynne Brown como ministra es además la segunda buena noticia que nos llega desde Sudáfrica en pocos días. El pasado miércoles Zakhele Mbhele, de 29 años, juraba como diputado de la nueva Asamblea Nacional por la la Alianza Democrática (el principal partido de la oposición sudafricana), convirtiéndose en el primer parlamentario negro abiertamente gay del continente.
Que bien que posición en altos cargos a personas que no temen a una sociedad; que bien esta persona que supo enfrentarse a las personas sin importar el que dirán. Me gusta, ojala esta acción se replicara en todo el mundo, y cada país le diera mayor importancia a estos hechos.