Dinamarca, primer país de Europa que elimina la necesidad de un diagnóstico clínico previo a la modificación registral del sexo
Dinamarca se convirtió hace una semana en el primer país europeo en incorporar de forma efectiva a su legislación la despatologización de la transexualidad, al aprobar una ley que elimina el requisito de contar con un diagnóstico clínico para proceder a la modificación de los datos registrales. La norma, que entrará en vigor el 1 de septiembre, permitirá a todas las personas mayores de 18 años modificar su sexo en documentos oficiales simplemente tras un periodo de 6 meses de «reflexión» desde que se solicita el trámite hasta que se confirma.
Hasta ahora, Dinamarca pertenecía al numeroso grupo de países europeos cuya legislación exige todavía la esterilización quirúrgica para proceder a la modificación de los datos registrales. Ahora este requisito desaparece, como ya sucediera en la vecina Suecia a finales de 2012 (por mandato judicial) o en Holanda a finales de 2013. Pero la norma va más allá incluso de suprimir la exigencia de cualquier operación quirúrgica de reasignación, al eliminar también la necesidad de un diagnóstico de «disforia de género». En este sentido, Dinamarca se coloca también por delante de países como España, que aunque dio un paso de gigante en 2007, todavía mantiene ese requisito y exige (aunque con algunas excepciones) dos años de tratamiento hormonal previo.
La nueva legislación danesa está en línea con las recomendaciones internacionales más actuales, como las de la Organización Mundial de la Salud, o con la que posiblemente se puede considerar la legislación más avanzada en materia de identidad de género, la aprobada en 2012 por Argentina, que también permite la rectificación registral sin obligación de acreditar intervención quirúrgica alguna ni terapias hormonales u otro tratamiento psicológico o médico.
«Como en 1989, cuando se convirtió en el primer país de mundo en legalizar las uniones entre personas del mismo sexo, hoy Dinamarca lidera otro importante cambio en Europa. En lugar de mantener la tutela del estado sobre las vidas y los cuerpos de las personas, el Parlamento [danés] ha reconocido que estos derechos pertenecen al individuo», ha declarado al respecto Gabi Calleja, copresidenta del Consejo Ejecutivo de ILGA-Europe.