«Gente como vosotros no los quiero en este hotel»: denuncian discriminación de un matrimonio gay en Talavera de la Reina
El colectivo Bolo-Bolo ha denunciado que un matrimonio gay fue discriminado el pasado día 11 en la Hostería Galería Cerdán de Talavera de la Reina (Toledo). «Gente como vosotros no los quiero en este hotel», les espetó el regente del establecimiento cuando se enteró que la pareja eran matrimonio. Fuentes de la hostería lo niegan.
La pareja ha denunciado ante la policía que cuando llegó al establecimiento, en el cual había reservado habitación a través de internet, el regente intentó poner todo tipo de pegas para alojarles y matizando que solo disponía de camas de matrimonio. Cuando los denunciantes le dijeron que eso no era un problema, ya que ellos lo eran, fue cuando el regente de la hospedería les insultó, arrojándoles incluso a la cara el dinero que ya habían entregado por el pago de la habitación.
Bolo (Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Castilla-La Mancha), organización a la que la pareja comunicó lo sucedido, quieren denunciar públicamente «la aún existente vulneración que viven las familias homoparentales», que demuestra como todavía hoy día «nuestras familias se ven expuestas a la discriminación y vulneración de derechos al ser visibles», en palabras de su vicepresidenta, Maribel Blanco.
Según recoge Europa Press, fuentes de la Hostería Galería Cerdán niegan lo sucedido. «Aquí no se discrimina a nadie y menos en los tiempos que corren», han argumentado.
HOSTERIA DE LA GALERIA CERDAN RESPONDE:
Me temo que este es el resultado de un cumulo de malas experiencias que, lamentablemente, le ha tocado sufrir a este matrimonio inocente.
Nos horroriza que haya sucedió esto, la reacción de nuestro gerente no fue ni mucho menos la correcta, pero su comportamiento no es un acto homófobo sino una postura ante el miedo de ver sus habitaciones destrozadas nuevamente. En un mes y medio hemos sufrido dos duras experiencias que, coincidentemente, han sido realizados por dos parejas homosexuales diferentes. Preservativos tirados por el suelo, otro derretido en una lampara por el calor de la bombilla, una lampara y una presiona rotas, basura por el suelo y colchas y toallas impregnadas de excrementos, como entenderán esto es algo que no es fácil de soportar para un gerente de 83 años.
Simplemente quiero que entiendan que aunque hay hechos que a rasgos generales parecen tremendos e intolerables, en esta situación solo se trata un comportamiento ante el miedo, nuestro gerente optó por una solución dramática de la cual nos arrepentimos completamente, por ello queremos dejar claro que cualquier pareja, sea como sea, es bienvenida en nuestro establecimiento y que este comportamiento jamás se volverá a repetir en nuestra Hostería.
Les pido disculpas por haberles ofendido con este hecho y esperamos que al menos puedan verlo con una perspectiva más cercana y familiar, por que no somos un establecimiento homófobo, unicamente somos una familia que ha cometido un grave error.
Atentamente
Elias Cerdan
Responsable de reservas
Temo que son ustedes los que deben entender que el hecho de que hayan sufrido daños en sus instalaciones por parte de ciertos huéspedes (cosa que deberían haber denunciado por otra parte, porque como agente de viajes entiendo que requerirán ciertos datos personales a la hora de realizar sus reservas), no es excusa alguna para rechazar a otros huéspedes que han realizado una reserva. En tienda usted que el hecho de rechazar a una pareja homosexual porque otras parejas homosexuales han tenido un comportamiento que todos tacharíamos de deleznable es el mayor exponente de discriminación que se puede aportar. Dudo mucho que el hecho fuera el mismo si los daños hubieran sido causados por dos parejas heterosexuales porque se quedarían ustedes sin clientes.
Dicho esto, espero que entiendan que, desde una perspectiva cercana, su explicación roza lo vergonzoso y, como una persona que no desea ningún mal a cualquier establecimiento turístico dada la situación actual, rectifiquen sus disculpas a un comportamiento inexcusable, como que el que ustedes reclaman,y así como se molestan en dar explicaciones que no nos llevan a ninguna parte, se disculpen con la pareja en cuestión, cosa que en ningún caso he leído.
Sinceramente espero que esto quede en un desafortunado incidente con una desafortunada disculpa y que todo les vaya bien a partir de ahora en su establecimiento
Un saludo
¿Y qué hace un señor de 83 años trabajando?
Mi padre tubo que salir a dar de comer a los caballos y pidió a mi abuelo que recibiese a los clientes si llegaban antes que el, cuando regresó….. bueno… se encontró con esta desagradable sorpresa. En todos los años que llevamos dedicados a la hostelería nunca nos había pasado esto, lo sentimos muchísimo y ante toda explicación solo podemos pedir disculpas.
Sé que esto puede chocar, pero me parece que no hay homofobia como política del hotel. Veamos: la explicación posterior en esa misma página añade que fueron a darle de comer a los caballos y le pidieron al abuelo de 83 años que quedara atendiendo. Además, han pedido disculpas en ese post y el siguiente. Si eso es así (y me parece que lo es), entonces tiene la pinta de ser un negocio mediano o pequeño donde se puede pedir un favor a un familiar (sé de lo que hablo por experiencia en hostelería). No parece un caso de discriminación como política del hotel, sino más bien un comportamiento inapropiado de alguien que, por edad, merece indulgencia. Francamente, hay homofobias mucho peores y no me parece correcto seguir con ningún boicot. Insisto, sé que no gustará. Pero a veces me veo en la necesidad de ir en contra de un sentir mayoritario. Y esta es una de ellas.
Curioso… Siempre se da crédito a quien denuncia y pocas veces al denunciado. La presunción de inocencia parece no existir entre heterosexuales y homosexuales. Se denuncia, se da crédito y, de paso y sin querer queriendo, se arruina un pequeño negocio familiar. ¡Olé!
No importan los antecedentes de esa familia en Talavera, su reconocimiento social por su labor cultural durante décadas. Nada importa. Llegan dos extraños (¿puede que sean unas personas más que susceptibles?, ¿sólo puede que así sea?) dan una versión, la publicitan, se arropan en los suyos (muy activos, por cierto) y se echa por tierra el prestigio conseguido durante años y años.
Ojalá haya juicio y, tras su resultado, puede que algunos tengan que morderse la lengua.
Saludos.
De la misma manera que antes he querido resituar la situación, ahora le quiero decir al último comentarista que si quería ayudar al hotel, no lo podía hacer peor.
Rechazar a una pareja gay por lo que hicieron otros está mal. Por eso el hostal ha pedido disculpas. Y muy bien pedidas. No lo venga usted a fastidiar con sus «defensas». Que más bien les perjudicará.
Y por cierto, lo de que son «extraños»… y yo que creía que un hostal estaba para alojar «extraños» mientras que los lugareños estaban en sus casos.
Lo dicho, que para «defenderlos» así, mejor se hubiera quedado usted callado.