La izquierda salvadoreña resiste las presiones de la iglesia y rechaza reformar la Constitución para prohibir el matrimonio homosexual
El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que gobierna en la actualidad El Salvador, aguantó las presiones de la iglesia católica y el pasado jueves se negó a dar su apoyo en la Asamblea legislativa a la iniciativa que, de haber sido aprobada, hubiera consagrado en la Constitución la prohibición del matrimonio entre personas del mismo sexo.
Se trata de una decisión que a día de hoy no supone ningún cambio en la situación de los derechos LGTB en El Salvador, dado que el matrimonio homosexual ya está prohibido por la legislación ordinaria, pero cuya carga simbólica es indudable, ya que la iglesia católica había convertido esa reforma constitucional en una de sus prioridades.
El FMLN había votado a favor de la reforma antes de las últimas elecciones, tras recibir fuertes presiones por parte del arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar, pese a que su posición inicial era contraria. Sin embargo, era necesaria una segunda votación tras las elecciones, una vez constituida la nueva Asamblea, y el FMLN decidió rectificar y recuperar su posición original.
Pese a que el arzobispo de San Salvador llegó a pedir a los partidos de derecha que boicotearan los presupuestos generales del estado para chantajear así al partido gobernante y conseguir su voto, el FMLN ha resistido las presiones y finalmente la reforma constitucional no saldrá adelante.
Muy bien por vencer los burdos e injustificados ataques de ese cerdo y homofobo monseñor arzobispo.
Iglesa católica=satanismo y dogmatismo opresor.
Vaticano, tarde o temprano ya pagarás por tu odio y fomentar la discriminación de colectivo LGTB