Tres brutales ataques homófobos en pocos días sacuden Inglaterra

Nos hacemos eco hoy de tres desgraciados episodios de violencia homófoba acontecidos en Londres y Manchester (Reino Unido) en el espacio de apenas unos días. Unos ataques fruto del odio que demuestran, una vez más, que la igualdad legal no es ni mucho menos el final del camino hacia la completa normalización de la realidad LGTB.

La primera de las agresiones se produjo nada menos que en el Soho, el barrio gay más conocido de la capital británica. El jueves de la semana pasada, al salir de un local en el que actuaba como drag queen, Benedict Stewardson, de 20 años, fue abordado por un grupo de hombres que comenzaron a increparlo al grito de “todavía no es Halloween”. Stewardson los confrontó y entonces uno de ellos le respondió que “Dios hizo hombres y mujeres, no hombres y hombres, Adán y Eva, no Adán y Esteban” y, según el testimonio de la víctima, lo golpeó en la mandíbula, tirándolo al suelo. La policía está investigando el suceso como un delito de odio.

En la noche de Halloween y a la mañana siguiente tuvieron lugar los otros dos ataques. Dos jóvenes de 19 y 25 años, Jake Heaton y Jean Claude Manseau, viajaban en un tranvía en Manchester cantando una canción del musical Wicked, cuando un hombre empezó a dirigirles insultos homófobos. Al bajar del tren fueron perseguidos por el agresor y una pandilla de otros 15 hombres, que los rodearon. Heaton fue golpeado en la espalda, pero pudo escabullirse y pedir ayuda en una tienda cercana. Mientras tanto, la horda se ensañó con Manseau, a quien golpearon en la cara y las costillas, rompiéndole la nariz y dejándole cicatrices perennes, además de “destrozar hasta el último ápice de confianza que tenía”, según sus propias palabras. Mientras se investigan los hechos, el Coro Gay y Lésbico de Manchester ha tomado la bonita iniciativa de actuar en los tranvías de la ciudad durante el próximo día 17 para “tomar la ciudad” y protestar contra la homofobia.

El ultimo episodio de violencia tendría tintes surrealistas si no fuera por la gravedad de los hechos. Dos hombres vestidos con tutús de color rosa y alas de hada profirieron insultos de carácter homófobo a dos muchachos de 18 y 21 años de edad en Londres el sábado pasado por la mañana. Los agresores disfrazados propinaron patadas y puñetazos a los jóvenes, uno de los cuales necesitó asistencia hospitalaria por los graves hematomas recibidos. Este miércoles se ha anunciado el arresto de dos sospechosos de haber perpetrado el brutal ataque.

Desde dosmanzanas esperamos que todos los agresores sean localizados y puestos a disposición de la justicia cuanto antes e insistimos en lo mucho que queda por hacer, también en los países supuestamente más avanzados de Europa occidental, para erradicar el odio homófobo y tránsfobo de la sociedad.