El Ejército de los Estados Unidos autoriza el tratamiento hormonal para la reasignación de sexo de Chelsea Manning
El Ejército estadounidense ha autorizado finalmente el acceso a tratamiento hormonal a la soldado Chelsea Manning. Sentenciada a 35 años de cárcel por filtrar a la web WikiLeaks un gran número de documentos que comprometían a la diplomacia estadounidense, Manning lleva esperando desde 2013 a que las autoridades militares autoricen el inicio de la terapia hormonal como parte de su proceso de reasignación de sexo.
Ya en agosto de 2013, tan solo un día después de ser condenada a 35 años de cárcel, Chelsea Manning comunicaba su intención de iniciar el tratamiento hormonal necesario para su proceso de reasignación de sexo. Su identidad de género ya había sido objeto de discusión hace más de tres años, durante el juicio. “Ahora que comienzo mi transición hacia esta próxima etapa de mi vida, quiero que todo el mundo conozca mi verdadero yo. Soy Chelsea Manning. Soy una mujer”, declaraba la soldado conocida hasta entonces como Bradley Manning, a la vez que manifestaba su intención de comenzar cuanto antes su proceso de transición.
En abril de 2014, Manning logró que un juez de Kansas decretara su derecho a ser reconocida oficialmente con su nuevo nombre de pila. Posteriormente, en septiembre del mismo año, la soldado demandó ante un tribunal de Washington al Gobierno estadounidense, debido a la falta de respuesta a su petición de iniciar la terapia hormonal. Según la demanda, el objetivo era “forzar” al secretario de Defensa Chuck Hagel y al Gobierno federal “a tratar sus graves necesidades médicas de acuerdo con su obligación constitucional”, ya que de no ser así, la soldado “sufrirá un dolor continuado, depresión y ansiedad y presenta un riesgo extremadamente alto de autocastración y suicidio”. El principal escollo parecía estar en que el tratamiento no está disponible en prisiones militares, ya que las personas transexuales están por el momento excluidas de servir en el Ejército de los Estados Unidos.
Aunque la demanda aún no se dilucidado en un tribunal, parece que las autoridades militares han reaccionado finalmente a las solicitudes de la soldado. En un memorando fechado el 5 de febrero, la coronel Erica Nelson, comandante en jefe de la prisión de Fort Leavenworth, centro donde Chelsea Manning cumple su condena, resolvía que “después de considerar cuidadosamente la recomendación de que el tratamiento hormonal es médicamente apropiado y necesario, y tras haber sopesado todos los riesgos de seguridad y protección asociados que presenta, apruebo la administración del tratamiento hormonal a la presa Manning».
Aunque aún no se conoce la fecha concreta en la que se dispondrá el necesario tratamiento a Manning, su aprobación ya supone una victoria para todas las personas transexuales que sirven en el ejército de los Estados Unidos. Según un informe realizado por Joycelyn Elders, antigua cirujana del ejército, se estima que al menos 15.000 personas transexuales engrosan las filas de las fuerzas armadas estadounidenses, y ninguna de ellas puede acceder a los tratamientos que necesitan debido a que deben ocultar su identidad de género para no ser excluidas del servicio. El pasado mes de diciembre, la secretaria del Ejército del Aire, Deborah Lee James, declaraba que “los tiempos han cambiado” y que esta política “es probable que se revise en el próximo año”.