La comunidad LGTB de Irlanda reclama los derechos de las personas transexuales tras la consecución del matrimonio igualitario
La aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo en Irlanda, mediante un referéndum celebrado el pasado domingo 23 de mayo, es un hito incontestable en la agenda LGTB. Sin embargo, no es ni mucho menos el fin último y, con su consecución, no cesan las reivindicaciones por una sociedad irlandesa plenamente igualitaria. Uno de los siguientes objetivos es mejorar la realidad de las personas trans en este país, con una de las peores situaciones legislativas en el ámbito de la Unión Europea. “Las personas trans aún se enfrentan a altos niveles de discriminación y marginación. Todavía no tenemos el reconocimiento legal de género”, reivindican desde la organización Transgender Equality Network de Irlanda en su cuenta de Facebook.
Nadie cuestiona, al menos desde el colectivo LGTB, la importancia de la aprobación del matrimonio igualitario en Irlanda. Como recogía dosmanzanas, el referéndum finalizaba con un 62,07 % de votos a favor de la reforma constitucional frente a un 37,93 % en contra. 42 de los 43 distritos electorales en los que se divide el territorio irlandés se situaban en la órbita del ‘sí’. Pero, sin dejar de reconocer y agradecer este avance hacia una sociedad más justa, el acceso al matrimonio entre personas del mismo sexo no supone el fin del camino. Así lo reivindica el activismo LGTB: “vamos a utilizar este impresionante impulso que se ha construido para lograr derechos para todos los miembros de la comunidad LGBT en Irlanda”, aseveran los integrantes de Transgender Equality Network (TENI).
“Irlanda es el único país de la Unión Europea que no ha proveído un reconocimiento legal de género”. Con este contundente mensaje comienza un vídeo, realizado por Invisible Thread Films para TENI y que podéis ver a continuación:
La exigencia de normalidad e igualdad legislativa de colectivo trans, con toda seguridad, formará parte de la semana del Orgullo Trans de Dublín, que tendrá lugar del 11 al 14 de junio. El festival TRANS-FUSION ofrecerá la posibilidad de disfrutar de esculturas, fotografías, pinturas, dibujos, instalaciones de arte y de video, literatura o teatro, entre otras disciplinas y modalidades artísticas, en un marco que (como ocurre en el Orgullo LGTB) combina exitosamente reivindicación, ocio y cultura para trasladar al conjunto de la sociedad los mensajes igualitarios y concienciar de la realidad a la que se enfrentan a diario, en este caso, las personas transexuales.
“Que nos escuchen a nosotros”
“El reconocimiento de género dará a todo el mundo la oportunidad de ser ellos mismos”, dice una de las mujeres trans en el vídeo antes citado. Otro activista explica la “destructiva” situación a la que se ven sometidas las personas trans de Irlanda a diario, al no ver su realidad de género reconocida en sus documentos de identidad. Acciones cotidianas para el resto de la ciudadanía como pagar con tarjeta de crédito y tener que enseñar el DNI o verse en la necesidad de identificarse para realizar cualquier gestión administrativa, por ejemplo, suponen un verdadero suplicio para la población transexual irlandesa. Estas personas se ven obligadas a tener que estar dando explicaciones continuamente, con la estigmatización que ello supone.
El proyecto de ley para el reconocimiento de género que estudia el Gobierno de Irlanda desde el año pasado “no protege adecuadamente la privacidad, la dignidad o los derechos de las personas transexuales”. “Estoy muy en desacuerdo de que no nos escuchen a nosotros”, añade una activista. Es este último reclamo, quizá, el que mejor define la situación: no se puede pretender legislar a favor de un colectivo sin contar con él como, al parecer, está ocurriendo en Irlanda con las personas trans. Esta postura recuerda a las proclamas del despotismo ilustrado (“Todo para el pueblo, pero sin el pueblo”), contestadas posteriormente durante la Revolución Francesa.
El texto legislativo propuesto no contempla ninguna disposición para los jóvenes trans, ya que las personas menores de 16 años no han sido incluidas. Asimismo, los mayores de 18 años requieren una evaluación médica antes de poder iniciar la transición y obliga a elegir, en algunos casos, entre la familia y el reconocimiento de la propia identidad. Esto ocurre porque, de no modificarse, la ley exigiría que las personas que se sometan a un cambio de identidad de género legalmente estén solteras. La europarlamentaria Lynn Boylan, perteneciente al partido irlandés Sinn Féin, considera que todo esto es, simplemente, “vergonzoso”.
Amnistía Internacional también denuncia el proyecto y critica la forma de proceder del ejecutivo (formado por una coalición entre el centroderechista Fine Gael y el Partido Laborista). “En lugar de hacérselo más fácil posible a todas las personas transgénero para obtener el reconocimiento legal de su identidad, hay diversos grupos que se verán defraudados por el proyecto de ley, en particular los que están casados o en uniones civiles, los menores de edad y los que no desean someterse a tratamiento médico”, argumenta Denis Krivosheev en nombre de la organización.
“Este proyecto de ley requiere cambios sustanciales si se trata de abordar el grave problema de la discriminación contra las personas transgénero”, añade Krivosheev. Desde dosmanzanas apoyamos la campaña para el reconocimiento de los derechos de las personas transexuales en Irlanda e invitamos a los legisladores a atender a la realidad de este colectivo para que no se de la paradoja, como decíamos, de hacer una ley para ellas, sin contar con ellas.