La funcionaria homófoba de Kentucky será liberada pero no podrá seguir impidiendo las bodas entre personas del mismo sexo
Kim Davis, la secretaria del condado de Rowan (en Kentucky, Estados Unidos) que fue encarcelada hace pocos días por impedir la emisión de licencias de matrimonio a parejas del mismo sexo podrá abandonar la prisión siempre y cuando no obstaculice la emisión de estas por sus subordinados. Veremos si Davis, que con su empeño en convertirse en «mártir cristiana» ha generado todo un circo mediático a su alrededor (al menos dos precandidatos republicanos a la presidencia habían anunciado ya su intención de visitarla en prisión), cumple la orden del juez…
Hace pocos días contábamos la historia con todo lujo de detalles, pero todo se reduce, en definitiva, a que Davis, la persona encargada de emitir las licencias de matrimonio en su condado no solo se negaba, sino que además no permitía que sus subordinados lo hicieran. “Emitir una licencia matrimonial que entra en conflicto con la definición divina de matrimonio, con mi nombre en ella, viola mi conciencia. No es un tema inocuo para mí. Se trata del cielo o del infierno”, justificaba Kim Davis en un comunicado propio de una funcionaria de un régimen teocrático. Al ser preguntada directamente por una pareja del mismo sexo sobre bajo qué autoridad les negaba su solicitud, respondía que “bajo la autoridad de Dios”.
El juez federal David Bunning, que llegó a ofrecer a Davis la posibilidad de evitar la cárcel si accedía a que sus subordinados emitiesen las licencias de matrimonio (a lo que se negó) decretó finalmente su ingreso en prisión por un delito de desacato.
Ahora, unos días después, Bunning emite una nueva orden que directamente impone a Kim Davis dicha obligación. La secretaria del condado (un cargo electivo, lo que hace virtualmente imposible su despido) no podrá interferir «de ninguna forma, ni directa ni indirectamente» la emisión de licencias por los funcionarios de su oficina:
Como explicamos en nuestra anterior entrada, la rebelión de Kim Davis (una «cristiana renacida» hace cuatro años tras una trayectoria que no puede definirse precisamente como de respeto a la «santidad» del matrimonio) es ya todo un símbolo de la resistencia de la derecha religiosa estadounidense contra el matrimonio igualitario. Las manifestaciones de apoyo se han sucedido frente al centro de detención en el que Davis ha permanecido estos días, y hasta dos de los precandidatos republicanos a la Casa Blanca (Ted Cruz y Mike Huckabee) habían anunciado ya su intención de visitar a Davis en prisión para transmitirle su apoyo. Una postura que contrasta, curiosamente, con la del precandidato que en estos momentos encabeza los sondeos como favorito de los electores republicanos, Donald Trump, que aseguró que el matrimonio igualitario es ya ley, y que por tanto si Davis no quería emitir licencias de matrimonio debería haber permitido que sus funcionarios lo hicieran.
Lo decíamos hace unos días y sigue siendo válido. Cómo termine finalmente el culebrón Davis será un buen termómetro de hasta qué punto el estado de derecho aguanta en Estados Unidos el embate del fundamentalismo cristiano. El condado de Rowan no es el único que se resiste a emitir licencias de matrimonio a parejas del mismo sexo. Hay otros varios, no solo en Kentucky, también en Alabama o en Texas. Diversos recursos judiciales están en curso, y los sectores más reaccionarios no van a cejar en su empeño.
Es curiosa la legislación estadounidense. Parece claro que no la han encarcelado por pensar cómo piensa, sino por no cumplir la ley como funcionaria. Quizá en nuestro país la amparase el derecho a la objeción de conciencia. ¿Dónde esta el límite de la prevaricación y de la objeción de conciencia?
Yo pienso que la Ley es la Ley. Si cada uno hiciese lo que le diese la gana, esto sería la selva: Un bombero blanco podría oponerse a rescatar a una familia negra de un incendio por creer el la superioridad de la raza blanca, un policía podría negarse a detener a un asesino homófobo porque va en contra de sus creencias religiosas, o una funcionaria podría no casar a una divorciada, o a una china con un blanco, etc etc etc. La Ley ( que la votan los ciudadanos) es lo más sagrado incluso por encima de los Dioses de cada uno. Los Dioses si existen, q legislen en el cielo, mientras en lo terrenal nos gobernamos nosotros
Iñigo, en EE.UU. lo realmente peligroso es declararse ateo. Por narices tienes que creer en algo. Así son
#3 Tienes razón, los Scots ya aceptan gays y lesbianas. Pero siguen discriminando a ateos y agnósticos. Muy lejos quedan de los Scouts mixtos españoles, donde chicos y chicas conviven juntos, y no se les impone ninguna religión. ¡Puto sexismo y puta homofobia(ambas lacras, creadas por las religiones)!
PD: Aunque algo está cambiando, como demuestra este caso; donde un cargo público ha sido castigado por anteponer sus creencias religiosas a la ley Civil.
Yo como funcionario me he visto obligado a pagar bastante dinero público al Rvdmo. Sr. Rouco Varela y eso iba contra mi conciencia de agnóstico, pero no podía negarme por que la Ley obliga a tramitar los expedientes que se adecuen a la legalidad, no así a la moralidad, tampoco cabe la objeción.