El Gobierno de la ciudad de Buenos Aires se doblega ante los sectores homófobos y recurre la boda de Freyre y DiBello ante el Supremo
No pudo ser. Finalmente, y tras un día de cierta confusión en el que se cruzaban noticias en uno y otro sentido, la boda entre Alex Freyre y José María DiBello quedó suspendida en espera de lo que decida el Tribunal Supremo argentino. Su caso se une así al de varias parejas del mismo sexo a las que en su momento no se les permitió contraer matrimonio, que ya vieron rechazadas en primera instancia su amparo y que están a la espera de lo que el alto tribunal decida.
En el caso de Freyre y DiBello se había dado la feliz circunstancia de que la jueza que vio su caso en primera instancia, Gabriela Seijas, les había dado la razón al considerar que la negativa del Registro Civil de Buenos Aires a registrar su matrimonio violaba la Constitución. El Jefe del Gobierno de Buenos Aires, el conservador Mauricio Macri, decidió no hacer uso de su derecho a recurrir, por lo cual el matrimonio estuvo a punto de celebrarse. Pocas horas antes, sin embargo, una estratagema jurídica urdida por los opuestos al matrimonio entre personas del mismo sexo daba al traste con la boda: la jueza Martha Gómez Alsina, a instancias de dos abogados, planteó un artificioso conflicto de competencias con Seijas y ordenó su paralización.
Pese a que Freyre y DiBello acudieron puntualmente a su cita y la jueza Gabriela Seijas ordenó al registro que la boda se celebrara si no quería incurrir en desacato, la situación creada ha acabado por acobardar al Gobierno de Macri, que además había recibido a lo largo de los últimos días fortísimas presiones de la iglesia católica, y que finalmente se ha inclinado por recurrir ante el Supremo y que sea éste el que tome la decisión definitiva «ante el conflicto planteado entre dos jueces de distintas jurisdicciones».
Una batalla ganada por los sectores homófobos, más poderosos en Argentina de lo que los acontecimientos sugerían. Pero todavía no se ha escrito la última palabra en los tribunales. Hay que recordar, además, que ante la propia Cámara de Diputados de Argentina se han presentado dos proyectos de ley para autorizar el matrimonio entre personas del mismo sexo que siguen sobre la mesa a la espera de que los grandes bloques se definan.
Puede que los homófobos y la Iglesia católica argentina hayan ganado esta «batalla» pero no la «guerra»
Con esta triste noticia podemos ver nuevamente que los poderes de los ultracatólicos y aquellos que siguen defendiendo el fascismo siguen muy vigentes en nuestros días.
Jamas ganaran la guerra, por la sencilla razón de que hemos empezado un proceso irreversible hacia la igualdad y la libertad. Aun así, cada batalla que ganan los homofobos es una derrota para nosotros, y sobre todo, para los individuos que en ese momento la sufren, por tanto debemos de luchar contra eso.
Esperemos que el recurso acabe en buen puerto
Esperemos que el Tribunal Supremo de la razón a esta pareja que no tiene la culpa de que en el mundo todavía queden muchos trogloditas mentales. Yo no sé para que los países quieren gobiernos si después estos ceden a los chantajes de esos curitas que se hacen llamar «hombres de dios». Será del dios del mal.
Al rato, no se preocupen…
Asi como se aprobaron los matrimonios interraciales pese a que el cristianismo se opuso ferozmente a los mismos, asi como se legalizo el divorcio y el voto femenino y también el cristianismo se opuso ferozmente a los mismos, asi como se abolió la esclavitud y a la ICAR le pareció extremadamente chocante… de ese modo el matrimonio homosexual se aprobará aún y cuando la panda de loquitos ultrarreligiosos de siempre hagan toda la rabieta que deseen.
#4 a unos les digo que no sean pesimistas, a tí tengo que decirte que te pasas de optimista, gracias a esa escoria tenemos que luchar por cada paso a tener los derechos humanos que nos corresponden con uñas y dientes.
No creo que haya que dejarles ladrar tanto, de hecho aquí en España propongo que las condenas por apologias del terrorismo se extiendan a las apologias de la homofobia, racismo y machismo, ibamos a divertirnos un rato viendo a los cristofascistas rabiar.
Como he dicho en mi anterior comentario, esta guerra ya no la vamos a perder, el proceso a empezado, la rueda gira y ya es irreversible, al final cosecharemos la ansiada igualdad.
Pero tambien es cuestión nuestra acelerar el proceso, no quiero que dentro de 6 generaciones (por poner un ejemplo) no haya niñ@s sufriendo al descubrir su condición, quiero que pase aquí y ahora. No se si me explico, quien dice ese ejemplo dice lo de los matrimonios, etc.
Porque a pesar de que ellos al final perderan, no podemos dejar que tanta gente siga perdiendo por su condición individualmente.
Que me lio xDDD siento que esté tan enreversado, yo me entiendo xD
No se ha hechado atrás, el fascista de Macri queria una oportunidad como esta para poder impugnar el matrimonio…si esque dios los crea y ewllos se juntan…
#5 Sor Lucía:
No es que me pase de optimista, es una realidad. A menudo, por más que las fuerzas religiosas más radicales se opongan con todo lo que tengan a toda forma de progreso (social, científico, politico, laico, secular, etc), tarde que temprano el progresismo siempre ganará aunque ladren mucho o poco. Lo cierto es que como bien das a entender nunca hay que dejar de luchar, principalmente pensando en las nuevas generaciones, en las próximas personas cuya orientación sexual no sea heterosexual.
Ahora, la experiencia dicta que no basta con hacer leyes que sancionen la apología del odio homófobo; si se ha de sancionar la apología del odio homófobo ha de ser toda apología del odio homófobo, sin consentir ninguna por «méritos especiales». ¿Por qué digo esto? Bueno, cuando una persona que no pertenece a la jerarquía eclesiástica dice algo como esto: «la homosexualidad es una enfermedad y una depravación moral», se le sanciona por hacer apología del odio homofóbico. Pero, sí el enunciado anterior lo dice, por decirlo así, un sacerdote católico o un obispo entonces resulta que ya no es considerado odio homófobo sino una «creencia religiosa digna de respeto» y al homófobo que lo dice un «creyente muy fervoroso».
Si se ha de sancionar toda apología del odio homófobo que sea toda. Porque precisamente esa es una de las cosas que está dificultando la aprobación del matrimonio homosexual en Argentina: por no hacerle «el feo» a la homofobia encubierta de «creencias religiosas respetables», muchos políticos están dispuestos a venderse a los intereses de la ICAR, a retrasar o incluso frenar dicha ley.
Interesante:
http://www.youtube.com/watch?v=J4KnLYeciLs
#7 por supuesto, hice el coment pensando en la sanción por odio homofobo precisamente de la iglesia y el PP (concretamente se me venian a la cabeza ellos, no que solo piense en ellos para aplicarla).
Eso sí, con la iglesia hay un problema, y es que debemos de una vez por todas hacerlos rendir cuentas ante la justicia como a cualquier ciudadano, hasta ahora se acogen a que solo los puede juzgar la propia iglesia, y ahí los tenemos, violadores de niños cuyo mayor castigo fue el que los cambiaran de parroquia
Perdón por resucitar este tema, pero quisera invitar a todes a denunciar este blog:
http://diariopregon.blogspot.com/
Allí se llama «putomonios» a nbuestros matrimonios (puto = maricón), además ser un blog que defiende las posiciones más rancias y ultraconservadoras.
Finalmente ganó el optimismo y la perseverancia!
NOS CASAMOS EL 28 DE DICIEMBRE PASADO !!!
Gracias por vuestro apoyo, ha sido fundamental !!!
Alex Freyre y José MAría Di Bello
¡¡Muchísimas felicidades, Alex!!
Lo sabemos, de hecho hemos hecho un seguimiento del tema en noticias posteriores a ésta.
¡Ánimo en vuestra lucha y a por todas, a ver si se consigue cuanto antes ampliar el derecho a toda la ciudadanía argentina!