Dos marroquíes son condenados a seis meses de prisión por mantener relaciones homosexuales
Dos varones marroquíes han sido condenados a seis meses de prisión por mantener relaciones homosexuales. La detención se produjo tras difundirse a través de las redes sociales un vídeo de ambos. Durante el juicio, uno de los acusados declaró que había sido maltratado verbal y físicamente por los agentes de Policía durante su estancia en comisaría. Se trata de la enésima detención y condena por homosexualidad ocurrida en Marruecos en los últimos tiempos, en lo que es un claro recrudecimiento de la represión en el país norteafricano.
El Tribunal de Primera Instancia de Tánger ha condenado a dos varones marroquíes a sendas penas de seis meses de cárcel, por vulnerar el artículo 489 del Código Penal de Marruecos, que castiga las relaciones homosexuales. También se les ha impuesto una multa de 1.000 dirhams (94 euros, 99 dólares).
Se trata de un estudiante universitario y un agente inmobiliario, que fueron identificados por la Policía el pasado 9 de febrero, después de que, durante semanas, un vídeo de ambos circulara por las redes sociales, e incluso en páginas de contenido pornográfico. Según algunos medios, el vídeo solo les mostraba dedicándose muestras de afecto, según otros, las imágenes les recogerían manteniendo relaciones sexuales.
El juez estimó que, con la difusión del vídeo, se podía considerar que ambos habían sido sorprendidos en flagrante delito. Sin embargo, en su declaración ante el tribunal, uno de los acusados afirmó que no habían sido ellos quienes difundieron el vídeo, sino un amigo de ambos que accedió a su teléfono móvil cuando lo dejaron momentáneamente en la mesa de un café. También afirmó que había sido maltratado verbal y físicamente por los agentes de Policía durante el tiempo que estuvo detenido.
Constante persecución de las personas LGTB en Marruecos
Como hemos venido informando de un tiempo a esta parte, parece darse un recrudecimiento de la persecución contra las personas LGTB por las autoridades de Marruecos, desmintiendo el tópico preexistente de que las leyes represoras no se aplican en la práctica. El artículo 489 del Código Penal marroquí, reiteramos, castiga los “actos licenciosos o contra natura con un individuo del mismo sexo” con penas de hasta 3 años de prisión, además de una sanción económica. Y el artículo 483 establece penas de hasta dos años de prisión por “obscenidad pública”. Lo cierto es que cada vez llegan más noticias de detenciones y condenas por violar la ley.
En noviembre de 2016, un varón homosexual español de 73 años y su pareja sexual, de 23, fueron detenidos, tras ser delatados por una camarera del hotel de Marrakech en el que se alojaban. El ciudadano español fue posteriormente puesto en libertad, pero no hubo noticias de qué acciones se tomaron con el detenido de nacionalidad marroquí.
Un mes antes, dos adolescentes eran detenidas tras haber sido sorprendidas por un familiar mientras se besaban en su propio domicilio. Finalmente, el tribunal desestimó los cargos por falta de evidencias, aunque ambas permanecieron detenidas, y una de ellas incomunicada, durante varios días.
También en 2016, en el mes de junio, fueron juzgados dos jóvenes por mantener relaciones sexuales en el interior de un vehículo y fueron condenados a 6 meses de prisión, en un “juicio” exprés y sin una defensa digna (ningún abogado quiso representarles).
En abril del mismo año, dos jóvenes fueron sorprendidos en la cama por un grupo de hombres que habían irrumpido en su vivienda, fueron brutalmente agredidos, y, con el rostro ensangrentado y desnudos, llevados a la calle para su humillación pública. La Policía, en vez de perseguir a los agresores, detuvo a las víctimas, que fueron juzgadas y condenadas a penas de hasta 4 meses de prisión por practicar la homosexualidad.
En febrero de 2016 nos hacíamos eco de la condena a 18 meses de prisión a dos jóvenes por cometer “actos con un individuo del mismo sexo” por un tribunal de Tiznit, al sur de Marruecos. Y poco antes, en enero, dábamos cuenta de la detención de dos jóvenes marroquíes por haber difundido un vídeo en el que se besaban en un lugar público.
También en 2015 tuvimos conocimiento de varias condenas en aplicación de ese mismo artículo. En el mes de junio se produjo la detención de otros dos hombres que se besaron, fotografiaron y dieron muestras de afecto ante la Torre Hasán, uno de los entornos históricos marroquíes más prominentes. A pesar de conseguir más de 71.000 firmas de personas todo el mundo pidiendo su liberación, ambos fueron condenados finalmente a cuatro meses de cárcel y una sanción económica.
Ese mismo mes, se denunció la detención de 20 hombres homosexuales en Agadir, acusados de “difundir la corrupción”. Según aseguró el colectivo Aswat, todas estas detenciones formarían parte de una campaña de arrestos dirigida por el Gobierno marroquí para reafirmar su posición en el debate público sobre la despenalización de la homosexualidad. Un mes antes, tres hombres más fueron condenados a la pena máxima, tres años de cárcel. Tras recibir una denuncia, la Policía capturó a dos de los hombres mientras mantenían relaciones. Al ser interrogados, informaron de que se habían conocido a través de un tercero, que finalmente también fue detenido y condenado.
También en años anteriores, dosmanzanas se ha hecho eco de diversas detenciones a personas homosexuales. En mayo de 2013 publicábamos la condena a cuatro meses de cárcel a dos jóvenes detenidos en “delito flagrante” cuando se encontraban en el interior del coche de uno de ellos. En mayo de 2014 seis hombres fueron condenados a penas que oscilaban entre uno y tres años por cometer “actos contra natura”. Y en octubre de ese mismo año informábamos de que un británico de 69 años era condenado a cuatro meses de prisión por homosexualidad (aunque finalmente fue puesto en libertad).