El Constitucional alemán avala el bloqueo impuesto por la gran coalición a la tramitación del matrimonio igualitario
Se cierra una nueva puerta al matrimonio igualitario en Alemania. El Tribunal Constitucional de ese país ha desestimado el recurso presentado por Los Verdes contra el bloqueo parlamentario de democristianos y socialdemócratas a tres proyectos de ley para la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo. La gran coalición tiene vía libre para seguir posponiendo una votación sobre el tema en el Bundestag hasta después de las elecciones de septiembre y, de hecho, es lo que volvió a hacer este miércoles. El SPD, además, mantiene las dudas sobre su compromiso con la igualdad matrimonial como condición irrenunciable para entrar en una nueva coalición de Gobierno.
Pocas novedades y mucha frustración en Alemania. Los últimos movimientos políticos y judiciales no son muy halagüeños para la igualdad LGTB. El martes pasado, el Tribunal Constitucional hacía pública su decisión de desestimar el recurso presentado hace un mes por el diputado Volker Beck, incansable promotor de la equiparación de derechos. El político verde pretendía obligar a los partidos del Gobierno, por la vía judicial, a desbloquear la tramitación parlamentaria de los proyectos de ley sobre matrimonio igualitario que llevan gran parte de la legislatura encallados por decisión de democristianos y socialdemócratas.
Concretamente son tres. El primero lo presentó La Izquierda (Die Linke) justo después de las elecciones de 2013, que resultaron en el acuerdo de gran coalición CDU/CSU – SPD. El segundo lo introdujo el grupo de Los Verdes en junio de 2015.Y el tercero lo aprobó el Bundesrat, la cámara alta del Parlamento donde están representados los estados federados, en septiembre de ese mismo año. Los partidos del Gobierno han sacado sistemáticamente del orden del día la discusión en el Pleno de los tres proyectos de ley, que languidecen en la comisión correspondiente del Bundestag.
El inmovilismo es una táctica que les conviene a ambos. A la CDU/CSU de Angela Merkel, por su posición contraria y para evitar la posibilidad de que aparezcan diputados “rebeldes” en sus filas, que voten favorablemente a la igualdad matrimonial. Y al SPD, para no tener que escoger entre rechazar la medida, contraviniendo su programa y sus promesas electorales, o votar a favor, provocando una posible crisis con sus socios de Gobierno. La perdedora de este juego de táctica partidista es la comunidad LGTB y la sociedad alemana en general, donde la igualdad de derechos goza de un apoyo ampliamente mayoritario.
Si los democristianos son coherentes con su posición oficial contraria a la equiparación, los socialdemócratas siguen jugando a la indefinición. En mayo, el ministro de Justicia Heiko Maas anunciaba lo que parecía un compromiso, y así lo recogimos, con la igualdad matrimonial como condición irrenunciable para entrar en una nueva coalición de Gobierno: “No me puedo imaginar que el SPD firme un acuerdo de coalición en el que el matrimonio para todos no esté incluido. Es una cuestión de justicia”. Pues bien, la dirección del partido ha decidido no incluir una propuesta de SPDqueer, el grupo LGTB del SPD, para fijar sobre papel precisamente la posición innegociable del partido sobre la igualdad matrimonial. La iniciativa se habría discutido en la convención de la que saldrá el programa electoral de los socialdemócratas y que tendrá lugar el próximo fin de semana.
El otro gran partido de centroizquierda, Los Verdes, sí que ha reafirmado su compromiso con el matrimonio igualitario en su programa electoral: “Con nosotros no habrá ningún acuerdo de coalición sin matrimonio igualitario”. Los democristianos de la CDU, por su parte, no descartan un acuerdo a nivel federal con la formación ecologista, con la que ya gobiernan en los Länder de Baden-Wurtemberg y Hesse. En ese caso, las posiciones inmovilistas de la CDU podrían flexibilizarse, según admite (a su pesar) el portavoz de política interior de la formación democristiana. En definitiva, todo dependerá de la correlación de fuerzas que salga de las elecciones de septiembre, para la que las últimas encuestas auguran de nuevo un claro triunfo de la formación de Merkel y la entrada de los liberales del FDP y la extrema derecha de AfD.
Mala noticia. Sin embargo y aunque espero que se apruebe lo más pronto posible el matrimonio igualitario a mi me preocupa mucho más los de AfD y la representación parlamentaria que puedan obtener. Dan un miedo….