Abre sus puertas en China un local dirigido a público homosexual con apoyo económico del estado
Por primera vez, un local dirigido al público gay ha abierto sus puertas con respaldo económico del estado chino. No será en ninguna de las grandes ciudades de China, que ya cuentan con locales de ambiente, sino en Dali, una ciudad de tamaño mediano de la provincia de Yunnan, al sur del país. En realidad se trata de una iniciativa pionera cuyo objetivo es ayudar a combatir la infección por VIH, cuyas tasas se habrían disparado entre el colectivo homosexual chino.
De hecho, la inauguración estaba prevista el pasado 1 de diciembre, Día Mundial de la Lucha contra el VIH/sida, pero la excesiva atención mediática la habría retrasado. El bar, que actuará además como un centro de difusión de información sobre la infección por VIH, abrió sus puertas el pasado fin de semana de un modo más discreto. Su promotor es Zhang Jianbo, responsable del Servicio de Dermatología de un hospital de la ciudad y fundador de una organización local de lucha contra el VIH/sida. En el bar será posible consumir bebidas a un precio más económico que en otros locales. “El bar no está solo abierto a homosexuales. Todo el mundo puede tomar una copa aquí”, ha señalado además Zhang, que desea que las personas heterosexuales se acerquen también al bar para fomentar la tolerancia y el conocimiento de la realidad homosexual.
Desde que las relaciones homosexuales fueran despenalizadas en China en 1997, la situación de gays y lesbianas en ese gigantesco país ha ido experimentando pequeños avances, siempre bajo la mirada atenta de las autoridades, que poco a poco permiten una mayor apertura pero abortan cualquier intento de “visibilidad excesiva”. El pasado junio, por ejemplo, las autoridades obligaron a cancelar parte del programa del primer Orgullo LGTB que se celebraba en Shangái. Hace pocos días informábamos de la organización del primer certamen de Mister Gay China, al cual sin embargo no serían invitados los medios de comunicación chinos más importantes. Pocas semanas antes, en septiembre, tuvimos conocimiento de un conato de enfrentamiento entre un grupo de homosexuales que frecuentaban un parque y la Policía, que intentó disgregarlos.