Roger Federer ve con buenos ojos la posibilidad de que un tenista del circuito ATP salga del armario
El tenista suizo Roger Federer, considerado por muchos el mejor jugador de la historia (y uno de los jugadores con mayor proyección mediática), ha dado su apoyo al colectivo LGTB. Fue hace un par de semanas, durante su última participación en el Masters 1000 de Cincinnati (Estados Unidos). Federer aseguró a un periodista que apoyaría a los compañeros del circuito profesional ATP que decidan salir del armario públicamente. «Creo que [salir del armario] sería totalmente aceptado», comentó.
Las declaraciones se produjeron cuando el periodista Jonathan Newman le preguntó a Federer por qué no había apenas tenistas profesionales fuera del armario (algo de lo que ya se han lamentado otras estrellas de este deporte, como Martina Navratilova), y si pensaba que el circuito ATP era un lugar seguro y receptivo para revelarse públicamente como homosexual. La pregunta fue formulada al hilo de un evento por la inclusión de los tenistas LGTB que se llevaría a cabo en Nueva York pocos días después, el 23 de agosto. Un acto que contó con la participación del periodista deportivo Nick McCarvel y del ex tenista Brian Vahaly, un jugador gay que nunca reveló su orientación (durante su carrera) pero que logró meterse entre las setenta mejores raquetas del mundo en 2003, y que hoy día está casado con otro hombre (con quien tiene dos hijos).
El de Basilea se mostró sincero y comentó que él apoyaría a los compañeros del circuito que decidieran salir del armario. «Sí, yo creo que no hay problema. Es cierto que no lo hemos tenido. Y no sé por qué, ¿sabes? ¿No hemos tenido ninguno, o es que algunos jugadores simplemente han elegido no hacerlo? Creo que sería totalmente aceptado, no hay problema. Apuesto por ello totalmente; es algo bueno…», respondió el carismático jugador.
El actual número dos del ranking mundial señaló también que «no importa de dónde vengas o quién seas, estoy totalmente de acuerdo en que seas abierto al respecto. Creo que te sentirás mejor en el proceso, para ser sincero, y todos deberíamos apoyarnos mutuamente en este planeta».
Asimismo, el sudafricano Kevin Anderson, actual número cinco del mundo, aprovechó su perfil en Twitter para mostrar hace unos días su apoyo a la iniciativa de Vahaly: «Palabras que me vienen a la mente cuando pienso en personas que están fuera del armario: valientes, fuertes, progresistas, intrépidas y líderes. Estoy muy orgulloso de mi amigo Nick por encarnar estos atributos y espero que apoyéis su causa si estáis en Nueva York el 23 de agosto».
Tenistas LGTB-friendly… y otros que no lo son tanto
Por desgracia, el hecho de que un tenista profesional salga del armario sigue siendo noticia hoy día. No en vano, el deporte profesional, en general, sigue siendo un territorio hostil para los LGTB visibles y poco dado, por tanto, a la revelación pública de una orientación sexual distinta de la heterosexual.
En este sentido, el pasado año recogíamos en dosmanzanas la brillante respuesta de John McEnroe a la lesbofobia de la extenista Margaret Court, que aseguró que el tenis estaba «lleno de lesbianas», entre otras afirmaciones plagadas de homofobia y transfobia. McEnroe, una de las grandes leyendas del tenis (ganador de siete Grand Slam entre 1979 y 1984), decidió terciar en la polémica, respondiendo a Court a través de un vídeo satírico en el que, entre otras cosas, relativizó su figura. «Margaret Court es una leyenda de nuestro deporte con 24 títulos de Grand Slam y 52 títulos en total. Vale, la mayoría de ellos los ganó antes de la era Open [cuando los tenistas profesionales no podían competir en los torneos del Grand Slam o en la copa Davis], pero, ¿alguien los ha contado?… 34, para ser exactos», comentaba el estadounidense, que también recordó que Court perdió el primer partido de la «batalla de los sexos» contra Bobby Riggs en 1973, y que ese mismo año Billie Jean King (otra tenista lesbiana) ganó a su vez a Riggs. «Creo que sé de donde te viene todo ese odio», se burló el exjugador.
También se mostró contundente el escocés Andy Murray, ex número uno del mundo. «No veo por qué alguien tiene un problema con dos personas que se quieren casar juntas. Si son dos hombres, o dos mujeres, eso es genial. No veo por qué debería eso importar. Todos deberían tener los mismos derechos», señaló el escocés. Por no hablar de la excampeona Martina Navratilova, abiertamente lesbiana. «Ahora está claro lo que Court es exactamente: una jugadora de tenis increíble, y una racista y homófoba», señaló en una carta abierta.
Otro antecedente lamentable, además del de Margaret Court, es el del ucraniano Sergiy Stakhovsky, actualmente en el 138 del ranking, que en 2015 declaró que no le gustaría que su propia hija practicara este deporte por la, según él, gran proporción de jugadoras lesbianas en la alta competición. También Martina Navratilova replicó entonces al ucraniano, asegurando que sus comentarios lesbófobos estaban fuera de lugar y se oponían a los valores del tenis.