Felipe Olguín, de 19 años, víctima de un asesinato homófobo en Chile

El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (MOVILH) de Chile ha denunciado ante la opinión pública el asesinato de Felipe Olguín Gómez. Los hechos se producían este martes pasado cerca de su casa, en Puente Alto, después de haber sido amenazado y ofendido por su orientación sexual. El joven, que vivía con su pareja, fue tratado de «maricón» o «mujercita» en distintos momentos por el asesino, según ha indicado su madre, Rosa Gómez. Este tipo de actitudes de odio persistentes provocó, según parece, una discusión en las cercanías del Persa Biobío, un mercado de Santiago de Chile. En medio de insultos sobre su orientación sexual, le apuñalaron el pecho hasta que perdió la vida. Un amigo de Olguín se lamenta de que «fue un acto homofóbico y de maldad. Ya había recibido amenazas y burlas por ser gay».

Tras el rifirrafe mantenido con Felipe Olguín, el agresor y un segundo sujeto, se adelantaron en un autobús para esperar a Felipe en una parada próxima a su domicilio. En medio de insultos sobre su orientación sexual, le apuñalaron el pecho hasta que perdió la vida. La víctima recibía sepultura este jueves en el Cementerio Sacramental de Bernardo, con la asistencia de un centenar de familiares, amigos y activistas. En su ataúd se colocó la bandera arcoíris, mientras un adorno floral señalaba «Jordan y Felipe», en referencia a su relación de pareja.

«Expresamos toda nuestra solidaridad a los amigos y familiares de Felipe, un joven que,  todos coinciden, nunca le hizo daño a nadie, pero sufrió durante gran parte de su vida burlas, bullying y acosos solo por su orientación. Estamos muy impactos porque en Chile sigan ocurriendo estos atropellos que violentan el derecho humano más básico, la vida», ha alegado Gonzalo Velásquez, presidente del MOVILH, tras asistir al funeral.

La prominente organización LGTB chilena ha indicado, asimismo, que en los próximos días «orientaremos a la familia, para cursar todas las acciones legales que sean necesarias, dar con la verdad y sancionar a los responsables, con la aplicación de la Ley Zamudio como agravante».

«Hay mucho dolor en familia, en sus amigos. Solo la justicia puede paliar en algo este daño. Llamamos a la sociedad a no ser indiferente con este tipo de crímenes, a ser más empáticos y a solidarizar. Los crímenes de odio merecen el más total y transversal repudio», han concluido desde el MOVILH

Erradicar el odio y la violencia LGTBfóbica en Chile

El pasado mes de marzo dosmanzanas se hacía eco de la publicación del 16º Informe Anual de Derechos Humanos de la Diversidad Sexual y de Género por parte del MOVILH. Solo en 2017, un año que el propio MOVILH calificaba como «de la furia» contra personas y activistas, las denuncias por LGTBfobia en ese país experimentaron un aumento del 45,7%. El informe recoge como uno de los detonantes de este aumento la presencia en Chile del «autobús de odio» de HazteOír y su marca internacional, CitizenGO. Como dato optimista el MOVILH recogía, además, 61 hitos favorables a la igualdad de derechos de las personas LGTBI en todo el país.

El informe incluye 484 episodios de odio, la cifra más alta desde que se elabora este registro y que por sí sola acumula el 20% del total de abusos ocurridos en los últimos 16 años. Estos episodios incluyen, según la división que el MOVILH detalla, 2 asesinatos, 56 agresiones físicas o verbales perpetradas por civiles, 1 abuso policial, 38 casos de discriminación laboral y 20 de exclusión educacional, 77 movilizaciones homo/transfóbicas, 38 episodios de marginación institucional, 11 obstáculos para el acceso a servicios o productos en los espacios públicos o privados, 72 abusos propinados por familiares, amigos o vecinos, 166 declaraciones de odio y 3 casos de vulneración de derechos en la cultura, los medios y el espectáculo.