Carlos Montero (guionista): «Los chavales de ‘Élite’ están talluditos, pero de muy buen ver»

Carlos Montero es gallego, tiene 47 años y estudió Ciencias de la Imagen. Ganó el Premio Primavera de Novela con su obra ‘El desorden que dejas’, creó ‘Física o Química’ y compartió estudios y piso con el cineasta Alejandro Amenábar. Pero, sobre todo, es el santo padre —creador y guionista productor ejecutivo— de ‘Élite’, la serie adolescente de Netflix que lo está petando en medio mundo.

¿Van a seguir dándole curro al forense de turno en la nueva de Élite?

Claro, está en la esencia de la serie. No seríamos Élite sin su trama de misterio e intriga. Le daremos curro al forense y a la inspectora de policía. Esperemos que la buena mujer esta vez esté más acertada… Aunque no prometo nada.

¿No están ya los chavales talluditos para andar en el colegio?

Eso pasa en todas las series adolescentes, sí. Están talluditos pero de muy buen ver. No os quejéis.

¿Se le pone el instinto paternal por las nubes cada vez que ve la serie?

¿A mí? ¿Ese instinto cómo es? Le dejo ese instinto y todas las preocupaciones a los padres.

Aquí, entre nosotros, ¿no cree que se le fue la mano con las drogas y la copulación en Física o Química?

¿Tú crees?

Un poco, sí. ¿También se pasó la adolescencia dale que te pego?

Qué va, yo tuve una adolescencia la mar de tranquilita. Era tirando a seta. Por eso ahora me desquito en la ficción.

¿Escribió El desorden que dejas porque le gusta ir por la vida regañando al personal?

[risas] Soy yo poco de regañar. Y menos por el desorden. El desorden es vida.

Fue compi de piso de Alejandro Amenábar en los noventa. ¿Quién de los dos era más ordenadito?

Él, él. Yo siempre he sido más desastre.

¿Usted también se ha dejado querer ya por Hollywood?

¡Qué va! Con mi nivel de inglés mejor me quedo donde estoy. Además, si ahora hemos conseguido la fórmula perfecta: trabajar desde España y llegar al mundo entero. No veo ninguna necesidad de mudarse a Hollywood. A mí que no me muevan de Madrid.

Le veo especializado en adolescencia. ¿Tiene controlado su síndrome de Peter Pan?

No, pero estoy en ello. A lo mejor cuando cumpla setenta… Sé que a mi edad ya empieza a ser un poco preocupante, pero la cabra tira al monte.

Dice que no conoce el amor adulto. ¿Espera ponerle remedio pronto?

Cuando dije eso me refería a que yo creo que el amor siempre se vive de manera adolescente. No que no me haya enamorado siendo adulto. Que sí, menos mal que me ha pasado. ¿Qué sería de la vida sin amor?

¿Algún vicio confesable?

Estoy cada vez más enganchado al móvil. Un desastre que no sé cómo cambiar. Todos los demás vicios mejor que se queden sin confesar.