Fingir (no) ser pareja: críticas de las películas «Entre nosotras» y «Dating Amber»

El último pico de la pandemia, sumado al retraso de la temporada de premios, ha devenido en un inicio de año desolador en lo que a estrenos respecta. Que el reestreno de la filmografía de Wong Kar-Wai (que incluye a la pionera asiática gay Happy Together (1997), muy recomendable) haya sido lo más comentado es prueba de ello. Y, como siempre, el cine LGTB ha salido especialmente mal parado. Es por eso que los dos estrenos a los que me dedico hoy, Entre nosotras (que llega a las salas hoy mismo) y Dating Amber (estrenada el viernes que viene) son motivo de celebración. Recuerdo, de paso, que para optar a los Premios Apolo de cine LGTBIQ (que celebraron su sexta edición hace dos semanas [ver palmarés]) es imprescindible pasar por cines españoles.

Entre nosotras es la apuesta internacional francesa esta temporada. Ya está nominada al Globo de Oro y ha pasado el corte del Oscar correspondiente. Curiosamente, su director, debutante, es italiano: Filippo Meneghetti. Él mismo escribió el guion en compañía de Malysone Bovorasmy y Florence Vignon, contando la emotiva historia de dos jubiladas secretamente enamoradas desde hace décadas que comparten una vida en común hasta que un triste suceso cambia las ternas y pone las cartas sobre la mesa. Barbara Sukowa y Martine Chevallier, ambas muy cautivadoras, encarnan a la pareja protagonista. Las dos compartieron el Lumière a mejor actriz y están nominadas, ahora por separado, a los Premios César, a los que también optan el guion y la dirección (novel). De una intimidad desbordante, esta dramedia aprovecha una premisa muy simple para abordar sentimientos tan profundos como arrebatadores.

Quien no tenga ganas de (demasiado) drama tendrá que esperar una semana más para el estreno de Dating Amber, segunda película del irlandés asentado en Londres David Freyne (la primera, llena de zombis, no tenía nada que ver: The Cured, 2017). En un instituto de la Irlanda de los 80, un chico gay (Fionn O’Shea) y una chica lesbiana (Lola Petticrew) fingen estar enamorados para rehuir los rumores sobre su orientación sexual. El resultado es una comedia social con inevitables tintes dramáticos que juega, no siempre acertadamente, con distintos tonos pero enamora con su atractivo plantel de personajes, a destacar, claro está, la carismática pareja protagonista. En la línea de Pride (Matthew Warchus, 2014), la película reviste la tragedia de la homofobia de color y alegría, garantizando un rato más que agradable sin olvidar el ojo crítico. Al tiempo surrealista y muy real, la película obtuvo una mención especial en el New York’s LGBT Film Festival y pudo verse en España el pasado otoño en el marco del Festival de Gijón.

Entre nosotras y Dating Amber son películas de corte opuesto pero comparten la reivindicación del derecho a ser uno mismo. Ambas son estupendas para dejar de pensar en la pandemia por un rato. Id a verlas, que el cine es un lugar seguro y lo necesita. Y aprovecho para informar de otros estrenos LGTB próximos: Una niña (12 de marzo), El horizonte (19 de marzo) y Supernova (23 de abril).