La Red por la Despatologización Trans exige que se retire el Premio Triangulo Rosa Año Trans a la UTIG de Madrid
Desde la Red por la Despatologización Trans, recibimos con indignación la noticia de que COGAM otorga el “Premio Triángulo Rosa Año Trans” a la “Unidad de Trastornos de Identidad de Género” (UTIG) del Hospital Ramón y Cajal de Madrid. Consideramos muy grave que se conceda un reconocimiento de estas características a un equipo médico que trabaja en el marco de un protocolo patologizador y que expide certificados de “trastornos de la identidad de género” sin una postura crítica.
Observamos una contradicción clara entre esta valoración positiva y la situación actual tanto de la UTIG de Madrid como de las otras unidades especializadas en el proceso de reasignación de género en el contexto español. Todavía hoy, estas Unidades no han expresado nunca su desacuerdo con el hecho de que la transexualidad esté catalogada como un trastorno mental. Lamentamos que la asociación COGAM, una asociación LGTB española, conceda el “Premio Triángulo Rosa Año Trans” a la UTIG del Hospital Ramón y Cajal de Madrid y no sea capaz de reconocer el importante activismo trans español. Una de las principales exigencias del activismo trans en el mundo es que la comunidad médica deje de hablar en nombre de las personas trans, y que deje de considerarse la transexualidad como una enfermedad. Por ello nos parece muy grave simbólicamente que se conceda este premio a un equipo médico, que además no cuestiona la patologización de la transexualidad.
En un momento en el que el Gobierno español se ha comprometido a solicitar a la Organización Mundial de la Salud la eliminación de la transexualidad de la Clasificación Internacional de Enfermedades, en las “Unidades de Trastornos de Identidad de Género” el acceso a los tratamientos hormonales e intervenciones quirúrgicas de reasignación de género sigue dependiendo de un diagnóstico con terminología psiquiátrica. La persona trans que acude a la UTIG se encuentra expuesta a una evaluación externa sin certidumbre sobre la duración del proceso, y con un control de género por parte de algunos profesionales de esta unidad, que pueden dificultar sobremanera una relación respetuosa con el usuario. La función evaluadora del profesional de Salud Mental puede dificultar la expresión de posibles dudas y preguntas sobre el tratamiento. Constatamos que el protocolo de atención actual parte de un modelo de terapia tripartita que no recoge la diversidad de trayectorias y prioridades de tratamiento de las personas trans, además de seguir criterios diagnósticos basados en estereotipos de género obsoletos en la sociedad actual.
Por esas razones, pedimos que se retire de inmediato el “Premio Triangulo Rosa Año Trans a la UTIG de Madrid y además se plantee urgentemente una reforma del modelo de atención seguido en las UTIG que debería incluir, pero no limitarse a un cambio de su denominación. En este sentido, demandamos:
- Un modelo de atención que no considere la transexualidad como trastorno mental o patología, sino que esté basado en el reconocimiento de la identidad de género y derecho de decisión sobre el propio cuerpo.
- El no seguimiento de los criterios diagnósticos actuales de “trastorno de identidad de género” establecidos en el DSM-IV y CIE-10.
- El libre acceso a las terapias hormonales e intervenciones quirúrgicas de reasignación de género, a través de un proceso de decisión compartida y consentimiento informado.
- Una atención personalizada que reconozca la diversidad de identidades de género y prioridades de tratamiento de las personas trans.
- La sustitución de la función evaluadora del profesional por un rol de información y acompañamiento en el proceso de tratamiento.
- La disponibilidad de un servicio de asesoramiento de carácter no obligatorio.
- La participación del movimiento trans en la elaboración de los protocolos clínicos y en la gestión de la atención sanitaria trans-específica.
Me parece estupenda la campaña para la despatologización, siempre y cuando la misma no redunde en la eliminación de los pírricos derechos que el colectivo de personas transexuales ha obtenido a lo largo de la história.
Las personas transexuales nos sentimos identificadas como hombres o mujeres.
No somos ambiguas ni difusas y necesitamos que la sanidad pública atienda todas y cada una de nuestras necesidades.
Otra cosa muy distinta es que se luche por la despatologización desde el activismo social, pero ésta lucha nunca puede recaer en detrimiento de los tratamientos a las personas transexuales, ni a quienes se ocupan de asistirnos.
Por este motivo, entre otros, considero MUY ACERTADA la concesión del TRIANGULO ROSA a la UTIG de Madrid y a todos/as los y las profesionales que abanderan, siguendo unos protocolos establecidos de antemano, una parte tan importante de nuestros derechos.
No confundamos más a la opinión pública con denúncias mediaticas que una vez más, suponen un ataque tranfòbico encubierto hacia el colectivo de personas transexuales.
Quienes elaboran las leyes y las normas son los legisladores, quienes se ven a la obligación de ejecutarlas, nunca pueden ser culpables de ello, ni mucho menos acusarlas.
Marta Salvans
buena apreciación Marta, hay que unir las demandas de derechos sanitarios (cosa en la que está todo el mundo de acuerdo) con el jurasico modelo binarista de género (en el que solo creemos 4 gatas adictas a los roles de género).
Solo así podrá parecer que pintamos algo en la lucha trans…… por la subvenciones digo….
Eso si, a ver si este octubre-trans podemos conseguir otra vez que parezca que estamos dentro de la Red Internacional, no sea que todo el mundo se de cuenta ya de que nuestra FELGTB y satelites nos hemos quedao en el papel de meros floreros!!
COGAM enhorabuena por esta decisión tan llena de coherencia e inteligencia política: os habeis cubierto de gloria!!! Que os paguen bien!!
Si alguien me diagnosticara «Disforia de género» y luego una asociación LGTB le diera un premio, me indignaría mucho.
Anarres,
Ya quisieramos las personas transexuales vivir indignadas, lo que supondria como mínimo vivir.
Aunque debes saber y valorar que ser diagnosticadas con disforia de género, algo que no padecemmos, nos supone un sinfin de restituciones a nuestros derechos. Entre ellos el poder acceder a una documentación que pone fin a multitud de otras discriminaciones mucho mas graves, y a unas cirugias que para algunas son totalmente imprescindibles.
Dicho lo dicho, prefiero un mal menor llamado disforia de genero, que la discriminación permanente, incluso proviniendo de grupos auto-denominados «trans» donde por cierto, la presencia de personas transexuales brilla por su ausencia permanente.
Gay blanco, no se como te sentiras tu, si como un hombre, una mujer, un microondas o como una nevera, el caso es que desde que la humanidad existe, existe a la par el binomio hombre-mujer y las personas transexuales te aseguro que nos sentimos mas de acorde a los dos primeros términos que a los segundos, donde además carecemos de enchufe alguno.
Por cierto ya que mencionas un octubre trans te pregunto:
¿Trans qué?
Marta Salvans
Cuanta transfobia en el comentario anterior..qué triste que una persona que dice ser transexual considere que está bien conseguir derechos en base a que se nos considere enfermos…
Saludos
marta, es que ese es el problema, que para conseguir unos derechos (que como dices, son muy mínimos), tengais que haceptar que os traten de enfermos. Me parece de maravilla que os den una cobertura sanitaria y psicológica, pero eso no debería ir ligado al concepto enfermedad (igual que en un parto nadie consideraría a la mujer enferma por estar embarazada, y los recursos médicos estan igual a su alcance). Como si alguien no quiere ese tratamiento médico y/o psicológico, debería poder decidirlo sin por ello renunciar a otros derechos básicos, como el cambio de sexo en el DNI, algo que desgraciadamente es tan básico en algunos casos para conseguir un trabajo digno. (Y ya no hablemos de los dos años de espera, o de dejar fuera a todas las personas menores de edad)
Si hay una entidad que trata bien a las personas transexuales, me parece bien si esas personas les muestran su agradecimiento, pero en ningun caso se debería premiar a una persona o entidad que colabore a perpetuar las discriminaciones que aun viven las personas transexuales.
http://bloqueorgullocritico.wordpress.com/acciones/
Anarres, mencionas en tu escrito «para conseguir un trabajo digno» y yo te respondo con todos mis respetos, que la ley es la que manda en nuestro caso y solo para conseguir un trabajo, (lo de digno ya queda para otra etapa)para cirugias hace falta también un diagnóstico lo que para una partera no es necesario siempre que no se tenga que practicar una cesarea (en este último caso si es necesario un diagnostico prévio a dicha cirugia)
Que quieres que te diga, las leyes, que yo sepa hasta la fecha las legislan los legisladores, no l@s psiquiatras, ni l@s endocrin@s. Ellos se limitan a cumplir con sus tareas y funciones, que ya son bastante complicadas de por si.
¿Trans qué?
Tienes razón cuando dices que «es triste que una persona que dice ser transexual considere que está bien conseguir derechos en base a que se nos considere enfermos…»
pero no olvides que aunque sea triste, por lo menos sobrevivimos con unos minimos derechos que de otra manera solo se nos otorgan una vez muert@s basados en un silencio que es mas triste todavia para quien lo pueda percibir.
Lo siento, pero si no lo argumentas mejor me continuo quedando con mi comentario anterior.
Marta Salvans
Me parece perfecto el despatologizar la transexual, asi que cada uno se page su tratamiento y sus operaciones, no esta el pais para pagar estas cosas esteticas. Tenemos que defender nuestro dinero publico y gastarlo en patologias de verdad como la salud bucodental.
Contais con mi apoyo para que estos tratamientos salgan del sistema publico.
Estoy completamente de acuerdo contigo ,Cristal, que cada uno se paga sus esteticas!
Juan
Que cada uno se pague de su bolsillo sus tratamientos! Con esta crisis no estamos para lujos.
Ana
jajaja! qué gracioso me parece el comentario de ana y cristal…. Es evidente,si se trata de estética que cada uno se pague lo suyo, si soy morena y quiero ser rubia, nadie ha de pagarme el tinte y como eso el resto. Ahora bién y estando siempre de acuerdo con el ejemplo de la salud bucodental, la cual también debería encargarse la sanidad pública, bucodental no significa ponerse una boca de estrella, como tampoco se trata en el caso de la transexualidad femenina, el hecho de desear un pecho de dimensiones «X», el pecho ha de ir acorde con más cosas….
No se si me he hecho explicar bién, no se trata de un cambio estético, sino de una corrección en un desacuerdo físico y mental.
Esto necesita información y se puede consiguir si existe realmente ganas de saber ¿por qué?, y de verdad, siendo al final todos humanos ¿creeis que nadie se complicaría la vida de la forma que la hace el colectivo transexual?
Saludos para todo el foro