Reino Unido: gays, lesbianas y bisexuales «salen del armario» cada vez más jóvenes
En cuatro décadas, la edad media a la que las personas que se identifican como gays, lesbianas y bisexuales desvelan a otros su orientación sexual se ha recortado en veinte años. Al menos así es en Reino Unido, país en el que el colectivo Stonewall ha hecho público los datos de una encuesta online realizada a 1.536 personas.
Entre los mayores de 60 años que respondieron a la encuesta, la edad media a la que «salieron del armario» son los 37 años. En el grupo de personas en la treintena, la edad media son los 21 años, mientras que en el grupo de 18 a 24 años la edad media son los 17 años. Entre los menores de 18, la edad media se sitúa en 15 años. La encuesta ha dejado fuera a aquellos que se identifican a sí mismos como gays, lesbianas o bisexuales pero todavía no se han atrevido a comunicarlo.
Dejando aparte los sesgos evidentes de un estudio como éste (lógicamente, la edad media siempre será menor cuanto más joven es el grupo de referencia), según el análisis de Stonewall la encuesta muestra una clara tendencia a reconocerse públicamente como persona LGB a una edad más joven. «Uno debe salir del armario cuando se sienta preparado y confiado, pero existe una tendencia que envía un mensaje muy positivo a aquellos que todavía no lo han hecho: no tienes que esperar. Reino Unido es hoy un país más justo que antes, y puedes encontrar apoyo», ha declarado Ruth Hunt, directora de asuntos públicos de Stonewall. Para Hunt, la clave es el mayor acceso a la información sobre sexualidad, asi como la mayor visibilidad pública de personas LGB con las que los más jóvenes pueden identificarse, a diferencia de lo que ocurría hace años.
Hunt ha destacado que esta mayor visibilidad LGB entre los más jóvenes obliga a que colegios e institutos adopten políticas mucho más activas para prevenir el acoso o bullying homofóbico.
Por el sufrimiento que padecieron los que salieron del Armario a los 40, se facilitó la tarea para que los chicos lo hagan, ahora, a los 15.
Esas generaciones nos dejaron un mundo con sociedades mas igualitarias.
En México es una horrible tradición el correr de la casa al jovencito que resulta ser gay o transvesti. Yo ví muchos casos, chicos que «se les notaba» fueron expulsados y puestos de patitas en la calle por sus monstruosos padres, expuestos a peligros en las calles.
Los padres de familia deben entender que ser gay no es malo, y que deben apoyar a su hijo. Esos «padres» merecen el más completo repudio.
Esos son los padres de familia que tanto le gustan a los sectores ultraconservadores obsesionados con la familia tradicional.