Posible caso de discriminación lesbófoba en el ejército británico
La capitana del ejército británico Karen Tait ha acusado al ministerio de Defensa de su país de retirarle la placa y de interrumpir su misión en Afganistán por razón de su orientación sexual. A Tait se le ha prohibido, además, asistir a los funerales de sus compañeros muertos en combate.
Los hechos ocurrieron durante el año 2009. Tait conoció a la sargenta Caroline Graham en Winchester (Reino Unido) y ambas iniciaron una relación. Según la demandante, decidieron posponer su noviazgo cuando supieron que estaban destinadas en Afganistán.
Según sus superiores, Tait, quien estaba a cargo de asignar a cada soldado su papel, trasladó a Graham desde Kadahar a Camp Bastian, donde se encontraba la capitana. Tait afirma que su decisión se debió a que Graham estaba rebajada del servicio por razones médicas, debido a una lesión de espalda, y que no tuvo «ningún tipo de relación íntima con Caroline de ninguna clase. No hubo contacto físico deliberado«. En diciembre de 2009 se le informó de la interrupción de su misión por «mala conducta social».
La capitana declaró ante el tribunal que «al primer demandado [la teniente coronel Poneskis] no le gusté por ser lesbiana» y dijo estar «desolada por ser expulsada de mi puesto«. Uno de los informes de la investigación afirma que Tait «ha permitido que esta relación afecte su juicio operacional hasta el punto de que trasladó a la sargenta Graham desde su ubicación para su satisfacción personal». La vista del caso sigue por ahora su curso.
La legislación en el Reino Unido permite a gays y lesbianas servir abiertamente en el ejército desde el año 2000, y de hecho esta institución es una de las que más empeño ha puesto por abrirse y atraer a personas homosexuales. Hace unas semanas, por ejemplo, supimos que una pareja de militares lesbianas participará en el próximo Orgullo LGTB de Manchester.