El Tribunal Supremo de Austria considera inconstitucional negar a las lesbianas el acceso a los tratamientos de reproducción asistida
El Tribunal Supremo de Austria ha dado la razón a una pareja de lesbianas que solicitó el acceso a las técnicas de reproducción asistida, algo que la legislación austriaca prohíbe. El Tribunal Supremo, sin embargo, considera que se trata de una flagrante discriminación por razones de orientación sexual, y ha elevado al Tribunal Constitucional del país una petición para que invalide dicha prohibición por inconstitucional. La decisión del Constitucional podría conocerse en otoño.
La pareja, residente en Wels (en el estado de Alta Austria), solicitó someterse al correspondiente tratamiento para que una de las mujeres pudiera quedar embarazada. La petición fue denegada, y la justicia ordinaria convalidó la negativa en base a la legislación austriaca, que prohibe a las mujeres lesbianas -tanto solteras como unidas civilmente- acceder a dichos tratamientos. Ahora el Tribunal Supremo considera dicha prohibición discriminatoria y contraria a la jurisprudencia de la Corte Europea de Derechos Humanos sobre la materia.
Se da la circunstancia de que Austria aprobó, a finales de 2009, una ley que permite las uniones civiles entre personas del mismo sexo, pero que excluye explícitamente la adopción conjunta o el acceso a las técnicas de reproducción asistida. Condiciones que (entre otras) permitieron que la ley recibiera el apoyo de los conservadores del Partido Popular Austriaco (ÖVP), que gobiernan en coalición con los socialdemócratas (SPÖ, partidarios de una legislación más avanzada).
La decisión del Tribunal Supremo ha sido recibida con gran satisfacción por los colectivos de defensa de los derechos LGTB. La clase política, por su parte, se muestra dividida. Socialdemócratas y Verdes han expresado también su satisfacción y su esperanza de que el Tribunal Constitucional comparta el criterio del Supremo y ponga punto final a la prohibición. El ÖVP, por su parte, ha expresado su desacuerdo, aunque respetará la decisión que finalmente adopte el Constitucional. El ultraderechista Partido de la Libertad (FPÖ), considera la decisión un «experimento sociopolítico» y ha expresado su esperanza de que el Constitucional se pronuncie en contra. El también ultraderechista Unión por el Futuro (BZÖ), la escisión del FPÖ que en su momento encabezó el fallecido Jörg Haider, prefiere no pronunciarse hasta que haya una resolución definitiva.
Una prueba másd de que nuestros dreechos casi nunca se consiguen por las buenas. Casi siempre son los tribunales los que tumban esas leyes discriminatorias que pretenden tratarnos como ciudadanos de segunda.
Por cierto, y aunque no tiene nada que ver con este tema, no puedo pasar sin comentar lo que a estas mismas horas está sucediendo en la cadena enemiga «telecirco», como muy bien la llama Ozores. Están poniendo un programa llamado «En buena ley» que jamás había visto, pero haciendo zapping el diablo ha querido que presencie como al parecer esta barriobajera cadena tiene a bien debatir sobre si se puede o no curar la homosexualidad, con testimonios de homófobos defendiendo lo de siempre (ya os imaginareis), y con gays de pocas luces prestándose a semejante humillación, y digo de pocas luces por que la primera pregunta que deberían de hacerle a la presentadora es por qué telecinco se presta a semejante indignidad en el año 2011, haciendo de la homosexualidad y de su «curación una cuestión de debate.
Lo que me resulta terrible es que a estas alturas una cadena de televisión, al mediodía (aunque eso es lo de menos por que daría lo mismo que fuera en la madrugada) no tenga el más mínimo reparo en poner en el punto de mira la homosexualidad y, por ende, a los homosexuales. Creo que este hecho debe ser denunciado, no sólo con notas de prensa de condena, sino que se debe llevar al juzgado por atentar claramente contra el honor de las personas LGTB.