Lingüistas expulsados del ejército por ser gays podrían haber evitado el 11-S
Según Dan Choi co-fundador de KnightsOut, un grupo que lucha contra la prohibición de declararse homosexual en el ejército estadounidense (Don’t Ask, Don’t Tell), que el Departamento de Estado norteamericano interceptó un día antes de los atentados del 11-S un mensaje que decía: ‘Mañana es la hora cero’. En declaraciones a Pink.news, Choi mantiene que cualquiera de los lingüistas homosexuales expulsados del ejército en aquella época habría sido capaz de traducir un mensaje tan simple.
Alrededor de 12.500 personas han sido retiradas del ejército desde la introducción del ‘DADT’ en 1994, entre ellas 60 lingüistas expertos en árabe.
Contrasta esta noticia con el argumento de la seguridad nacional, utilizado por muchos para oponerse a la derogación del Don’t Ask, Don’t Tell. La semana pasada el general retirado James L. Lindsay afirmaba que permitir a gays y lesbianas hacer pública su orientación podría llevar a la renuncia de los más de 225.000 miembros de las fuerzas armadas que se han manifestado en contra, y a que muchos decidieran no alistarse, lo cual sería un riesgo para el ejército y la seguridad nacional.
El secretario de defensa Robert Gates dijo la semana pasada que era improbable que se levantara la prohibición a corto plazo, a pesar de que en enero, el presidente Obama fue tajante. Ante la pregunta de si revocaría la prohibición, estas fueron sus palabras: ‘A un político no le oirás mucho responder con una sola palabra, pero la respuesta es: Sí’
Es de coña…
Es lo que tuvo Bush….
Ochenta mil lingüistas más no habrían servido de nada. Fue un golpe de estado.
Al menos nos da la potestad de ponernos con tono mesianico (y biblia en mano, como Bush y todos los de su ralea) y promulgar que «Dios odia la homofobia»… claro que a lo mejor no es buena idea porque me recuerda a cierto grupo religioso altemante endogamico.