Polémica por el apoyo de un jugador de los New York Rangers al matrimonio igualitario termina con presentador deportivo despedido
La semana pasada, el New York Times anunciaba que el jugador de hockey Sean Avery, de los New York Rangers, se había sumado a la campaña de Human Rights Campaign con un vídeo (bajo este párrafo) en el que daba su apoyo al matrimonio igualitario. En el vídeo, el deportista dice que ‘las personas que están comprometidas deberían tener el derecho a casarse con la persona a la que quieren’.
Posteriormente, Todd Reynolds, agente de destacados deportistas de la NHL (National Hockey League) expresó en su twitter su decepción ante el gesto de Avery. ‘Legal o no, siempre estará mal’, decía Reynolds en su mensaje. Después quiso aclarar que su oposición al matrimonio entre personas del mismo sexo no es una cuestión de odio. Según él son sus sentimientos religiosos y su creencia en la ‘santidad’ del matrimonio los que le llevan a estar en contra.
Damian Goddard, presentador de la cadena de televisión por cable Rogers Sportsnet, terció en la polémica el pasado martes con otro mensaje vía twitter, en el que decía apoyar ‘completamente y de todo corazón’ la defensa de Reynolds al tradicional y verdadero significado del matrimonio.
En el mismo día Sportsnet fue forzada a reaccionar, anunciando por la tarde tarde, también mediante twitter, que las palabras de Damian Goddard no reflejaban el sentir de la cadena. El miércoles la cadena despidió al presentador, quien ha declarado que no se arrepiente de sus palabras que, en cualquier caso, atribuye –como Reynolds- a su condición de ‘devoto católico’.
Hace unos días informábamos de la dimisión forzada del jefe de la delegación olímpica estadounidense para 2012, al divulgarse sus posiciones antigays. Parece que algunos sectores del deporte empiezan a reaccionar contra la homofobia. Nos quedamos con lo positivo, y esperamos seguir informando de gestos como el de Sean Avery cada vez con más frecuencia.
Esto es parecido al «¿y si él se tira por un barranco tu también?» Me gustaría que alguna vez los católicos dejaran de utilizar como excusa sus creencias religiosas, tanto para el matrimonio homosexual como para cualquier otra cosa. ¿Esque acaso no son capaces de pensar ellos mismos? ¿No tienen opinión propia? La religión atonta hasta un nivel inimaginable. Si alguien odia algo o no esta de acuerdo con algo tendrá alguna razón y no solo porque alguien lo diga. ¡Que den la cara y dejen de esconderse!