Obispo evangélico chileno rechaza las uniones civiles con nuevas declaraciones homófobas

La comunidad evangélica chilena prosigue su peculiar “cruzada” contra la posible aprobación del llamado “Acuerdo de Vida en Pareja” (AVP), proyecto que permitiría las uniones civiles entre personas del mismo sexo en Chile y que cuenta con el apoyo de organizaciones de la diversidad sexual como el MOVILH (Movimiento de Integración y Liberación Homosexual). El pasado domingo, el obispo Hédito Espinoza aprovechó la celebración del tradicional Te Deum Evangélico para lanzar duras críticas contra el aborto terapéutico y el AVP.

Ante la presencia del actual presidente chileno, Sebastián Piñera, el obispo Espinoza hizo gala de su homofobia, llegando incluso a referirse a los homosexuales como “enfermos” y a relacionar la homosexualidad con la pedofilia, el incesto o la zoofilia. Según Espinoza, debido a la actual lucha de la minorías sexuales, “mañana tendremos que orientar al pedófilo, aquel que le gusta el incesto, mañana tendremos que orientar al que está con la zoofilia”. A pesar de estas duras declaraciones el obispo quiso destacar el carácter integrador de su iglesia: “Se nos acusa que somos homofóbicos, no señores. Si hay alguien que tiene abiertas las puertas de nuestros templos para recibir a las personas que tienen problemas sexuales, a los gays, somos nosotros que tenemos las puertas abiertas para curar sus heridas”.

Las reacciones a estas nuevas declaraciones homófobas no se han hecho esperar. Varios representantes políticos del gobierno y la oposición han querido marcar distancias con el polémico discurso y el MOVILH ya ha convocado una “manifestación contra la homofobia religiosa” para el próximo 15 de octubre en la céntrica Plaza de Armas de Santiago de Chile.

El Censo chileno de 2012 incluirá a las parejas del mismo sexo

Por otro lado, y a pesar de la homofobia social todavía latente en este país sudamericano, nuevos avances se conquistan en el ámbito de la igualdad del colectivo LGTB. El Instituto Nacional de Estadísticas decidió esta semana incluir en el Censo de 2012 preguntas para conocer si las parejas chilenas son de igual o distinto sexo.

Este “hecho histórico”, según el MOVILH, permitirá ofrecer estimaciones sobre el número de parejas del mismo sexo que conviven en Chile, para así enfocar de mejor manera las políticas públicas dirigidas a las minorías sexuales. Desde el MOVILH realizarán una campaña “para instar a las parejas del mismo sexo a responder sin temor sobre su situación de convivencia” y ya esperan que “en el Censo del 2022 se consulte además sobre la orientación sexual y la identidad de género de todas las personas, y no sólo de los convivientes”.