Miembro homófobo de una junta escolar de Arkansas se ve obligado a dimitir
Hace unos días ya nos hicimos eco de McCance, que se mostraba satisfecho en su cuenta de Facebook por los suicidios de adolescentes LGTB, y no dudaba en sostener que abandonaría a sus hijos si resultasen homosexuales (entre otras “perlas” de semejante calibre y orgulloso de sus “valores cristianos”). Tras el comprensible escándalo suscitado por tales declaraciones de un miembro de una junta escolar y su persecución por parte de los medios de comunicación, McCance apareció finalmente el jueves en un programa de la cadena CNN, donde se disculpó y anunció su dimisión (cabe mencionar que el Departamento de Educación de Arkansas había condenado sus comentarios, pero no podía cesarlo como miembro de la Junta Escolar por tratarse de un cargo electo y responder por tanto sólo ante sus votantes, de acuerdo a la legislación del estado).
“Lamento haber hecho esos comentarios ignorantes”, declaró McCance. “Nunca estaría a favor del suicidio de ningún joven, ni de ningún tipo acoso a niños”. Estas declaraciones contrastan con las auténticas barbaridades que escribió en Facebook, incluso tras serle señalado lo terrible de su comportamiento, y han parecido huecas e insuficientes a muchos. Por ejemplo, según el presidente de Human Righs Campaign, Joe Solmonese, “sigue siendo llamativo que el señor McCance centrase sus disculpas en las palabras concretas que había usado, no en la intención tras dichas palabras. Esperamos que aproveche este tiempo para reflexionar no sólo sobre el lenguaje que usó sino sobre lo que puede hacer para mejorar las vidas de los jóvenes LGTB”.
Igualmente, el psicólogo e influyente presentador de televisión Phillip McGraw, ‘Dr. Phil’, ha definido la intervención de McCance como “la mayor no-disculpa que jamás he oido. […] No se ha disculpado por lo que dijo. No se ha disculpado por el mensaje que ha enviado a los niños, a los adolescentes, a las padres ahí fuera. […] Me preocupa que, con toda la atención que esto ha atraido, haya jóvenes LGTB que al verlo se digan “ves, esto es lo que realmente piensan”, y vuelvan hacia atrás”.
Uno de los periodistas probablemente más implicados a la hora de exigir responsabilidades a McCance es Anderson Cooper, quien había venido siendo blanco de ciertas críticas por mantener su supuesta homosexualidad oculta, pero cuyo trabajo le hecho ahora objeto de numerosos elogios.
Sólo faltaba verle la cara de «buena persona» para terminar de juzgar la calaña del tipo éste.
Este tipo de personas, son las que frenan el avance de las libertades individuales, al perpetrar la homofobia, porque, lo creamos ó no, estas declaraciones son apoyadas por más gente de la que creemos.
Llegará un día en que estos manifiestos por parte de ignorantes sean perseguidos penalmente.
Lástima que no esté presente en el mundo para verlo.
¡STOP HOMOFOBIA!