Alcalde francés abiertamente gay recibe dos casquillos de bala tras anunciar su intención de hacer uso de la ley de matrimonio igualitario
El alcalde de la localidad alsaciana de Sigolsheim, abiertamente gay, declaraba hace unos días en un periódico local su pretensión de casarse con su actual pareja en cuanto el matrimonio igualitario entre en vigor en Francia. Días después, recibía una carta en las oficinas del ayuntamiento, que contenía la página del periódico en la que aparecía su entrevista, con diversas enmiendas homófobas y dos casquillos de bala pegados.
El 26 de abril, Thierry Speitel, alcalde de Sigoslsheim, había concedido una entrevista al diario Dernières Nouvelles d’Alsace en la que se le preguntaba su opinión respecto a a la ley de matrimonio igualitario, ya aprobada y actualmente en proceso de ser validada por el Consejo Constitucional francés. Speitel, de filiación independiente pero que se declara ideológicamente de centroderecha y católico practicante, es abiertamente gay desde que se presentó por primera vez a las elecciones municipales de su localidad, donde ahora ejerce su segundo mandato. El alcalde declaraba que proyectaba casarse con el que es su pareja desde hace siete años e, incluso, se planteaba la posibilidad de la adopción. También abogaba porque todos los franceses pudieran “convivir juntos”, siendo esta frase la elegida como titular por el diario local.
En la página con la entrevista que se le envió por correo, el remitente había enmendado este titular, añadiendo un despectivo “¡pero no con enfermos!”. También escribió a modo de lista: “las prioridades son, 1) trabajo para todos, 2) impuestos para todos, pero no matrimonio para todos”. Pegados a la página del diario aparecían dos casquillos de bala de pequeño calibre. Thierry Speitel presentó inmediatamente una denuncia en la comisaría de Kaysersberg, por considerar que “enviarme balas es un gesto que significa, más o menos, que hay que acabar conmigo (…). Es abominable”. En cuanto se conoció la noticia, Speitel recibió el apoyo de la también alsaciana senadora por Estrasburgo Fabienne Keller, miembro de la derechista UMP que también había sido también objeto de amenazas por haber votado favorablemente a la ley de matrimonio igualitario.
Sucesos tan deplorables como este han tenido lugar durante todo el largo proceso de aprobación de la ley de matrimonio igualitario. Sirven de ejemplo las amenazas de muerte sufridas por un representante del grupo LGTB del Partido Socialista, que también incluían un casquillo de bala, o los diversos insultos y amenazas dirigidos contra el ponente del proyecto de ley, Erwann Binet. A ello hay que añadir las agresiones de que fueron objeto varios locales del Partido Socialista en el mes de enero. Aunque el suceso más lamentable fue la brutal paliza propinada el pasado mes de abril a una pareja de jóvenes homosexuales cuando paseaban cogidos de la mano por las calles de París. Como fondo de todas estas execrables actuaciones han estado las diversas manifestaciones convocadas por los contrarios a la igualdad de derechos para las personas LGTB, algunas de las cuales se han saldado con fuertes enfrentamientos con las fuerzas del orden, así como la sucesión de actos vandálicos frente a la Asamblea Nacional tanto cuando se deliberaba el proyecto de ley como cuando finalmente fue aprobado.
Las manifestaciones de los contrarios al matrimonio igualitario, por cierto, no se han detenido con la aprobación de la ley: este mismo fin de semana han tenido lugar nuevas convocatorias en diversas ciudades francesas, antesala de la gran protesta que tienen previsto celebrar el próximo 26 de mayo en París con el objetivo declarado de mantener la presión sobre el Gobierno.
no hay libertad. El fascismo y la idiotez siguen ganando adeptos en todo el mundo.
Desgraciadamente, la nauseabunda propaganda homofóbica lanzada por la Iglesia Católica francesa, las sectas autodenominadas «cristianas», los grupúsculos mahometanos y los partidos políticos y grupos cabilderos neo nazis, extremistas religiosos, y de extrema derecha, lograron apendejar a una parte de la población heterosexual francesa, léase la burguesía, pequeña burguesía, el lúmpen, y el proletariado. Utilizando los púlpitos, la prensa, la radio, la T.V. y el internet lograron sembrar el odio racista homofóbico en Francia. Pero no tengan miedo, los fachos homofobicones serán derrotados.