Montenegro celebra su primer Orgullo LGTB desafiando la violencia homofóbica
Este miércoles tuvo lugar en la localidad costera de Budva el primer Orgullo LGTB en la historia de Montenegro, y se vio marcado por la violencia. La policía tuvo que proteger a unos 40 manifestantes, separándolos de alrededor de 200 homófobos que lanzaron piedras, botellas y antorchas al grito de “matemos a los gays”. Desgraciadamente dicha violencia -que se saldó con 20 detenciones- no es enteramente inesperada, en un país fuertemente conservador y donde ya se habían producido ataques contra activistas LGTB. Este despliegue de intolerancia podría retrasar el acceso de Montenegro a la Unión Europea.
En mayo de 2011 tuvo lugar un ataque con gas lacrimógeno contra un concierto del grupo Lollobrigida, que tenía lugar en Podgorica (capital de Montenegro) con ocasión del Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia. La mitad del público precisó algún tipo de asistencia médica, y la gravedad de lo sucedido forzó a los organizadores del que iba a ser el primer Orgullo LGTB de la capital montenegrina a suspender por los actos, previstos para el 31 de mayo. Un mes antes el primer ministro de Montenegro, Igor Lukšić, había expresado su apoyo al que iba a ser el primer Orgullo LGTB de la historia del país, convocado por el colectivo LGBT Forum Progress. Lukšić reconocía entonces que la marcha sería un evento de alto riesgo para los participantes, dada la fuerte homofobia social existente en el país, pero aseguró que la Policía garantizaría su seguridad. Y en noviembre de 2011 el joven actor montenegrino Todor Vujošević denunció haber recibido graves amenazas tras protagonizar una campaña en favor de los derechos LGTB en el país balcánico.
Montenegro
Montenegro es un pequeño país de algo menos de 700.000 habitantes. Alrededor del 43% son montenegrinos, mientras que un 32% son serbios (no existen diferencias étnicas entre ellos). Hay además diversas minorías, sobre todo bosnios y albaneses. Tras la traumática desmembración de Yugoslavia, la República de Montenegro permaneció unos años federada con Serbia, hasta que en 2006 un referéndum decidió su independencia total, de forma pacífica.
Las relaciones homosexuales en Montenegro fueron despenalizadas en 1977, siendo la edad de consentimiento la misma que la de las relaciones heterosexuales. No hay reconocimiento legal de las parejas del mismo sexo, y de hecho su Constitución restringe el derecho a contraer matrimonio a las parejas heterosexuales. En julio de 2010, por exigencia de la Unión Europea (a la que Montenegro aspira a unirse) el Parlamento del país aprobó una normativa antidiscriminatoria que incluye la orientación sexual y la identidad de género como condiciones cuya discriminación queda prohibida, pero en abril del pasado año el Parlamento Europeo reclamaba más esfuerzos a Montenegro en materia de derechos LGTB. En cualquier caso, según una reciente encuesta realizada por Ipsos dos tercios de los montenegrinos consideran a la homosexualidad una enfermedad, y un 80% piensa que debería mantenerse en la esfera privada.