Zambia: la Corte Superior de Lusaka dictamina que la defensa de los derechos LGTB no está amparada por la Constitución (ACTUALIZADA)
Una juez de la Corte Superior de Lusaka, capital de Zambia, ha desestimado el amparo al activista Paul Kasonkomona, que se enfrenta a cargos por “conducta desordenada y ociosa” por defender públicamente los derechos LGTB. La magistrada estima que con su detención no se ha vulnerado el derecho a la libertad de expresión recogido en la Constitución del país africano.
En abril de 2013 fue detenido en Lusaka el activista Paul Kasonkomona, después de que defendiera los derechos de las personas homosexuales en el programa de entrevistas The Assignment, emitido por la cadena de televisión MUVI TV. La policía le esperó a la salida de los estudios y, aunque sus amigos trataron de esconderle en un coche, terminó deteniéndole acusado de infringir la sección 178(g) del Código Penal de Zambia, que castiga la “conducta ociosa y desordenada”, al establecer que con la defensa de los derechos LGTB “incitaba al público a tomar parte en actividades indecentes”.
Una vez iniciado el proceso, Kasonkomona solicitó que el caso fuera llevado a la Corte Superior, por entender que la vaguedad de la sección 178(g) vulneraba el derecho recogido en el artículo 20 de la Constitución de Zambia, que ampara el derecho a la libertad de expresión. El juez del caso estimó el recurso y trasladó los cargos al tribunal de mayor rango.
Pero este jueves 12 septiembre, la juez de la Corte Superior de Lusaka, Anne Sharpe Phiri, ha desestimado dicho recurso, resolviendo que tenía “la fundada opinión de que el asunto del que trata la sección 178(g) del Código Penal no es el mismo que el referido en el artículo 20 de la Constitución. Ambos temas son distintos. Por tanto, al no haber un problema constitucional relativo a la violación de los derechos fundamentales del acusado, no habría motivo para que el juez nos remitiera el caso. Por ello, se envía el expediente de nuevo al magistrado para que disponga sobre él”. Es decir, el defender de palabra y en público los derechos LGTB no está amparado por el derecho a la libertad de expresión que recoge la Constitución de Zambia.
Zambia, homofobia social y de estado
El dictamen llega tan solo unos días antes de que comience el juicio contra James Mwape y Philip Mubiana, detenidos en mayo de este año bajo la acusación de “sodomía o de mantener relaciones sexuales contra natura”. Ambos se enfrentan a penas que pueden llegar hasta los 14 años de cárcel.
Ejemplo del desprecio con que se tratan los derechos LGTB en Zambia fueron las declaraciones efectuadas a la prensa por su ministro de Interior a principios de este año. Edgar Lungu afirmaba que “los defensores de los derechos de los homosexuales deben ir al infierno. No es un problema que vayamos a tolerar. No habrá discusión alguna sobre los derechos de los homosexuales. Ese asunto es ajeno a este país”.
Zambia heredó la legislación homófoba de la época colonial británica tras su independencia en 1964. Tanto las relaciones homosexuales masculinas como las femeninas son ilegales, con penas que pueden llegar hasta los 14 años de cárcel. Se trata, de hecho, de uno de los países africanos en los que la homofobia social es más fuerte: hasta el 98% de la población considera la homosexualidad moralmente inaceptable, según datos de 2010.
La fuerte influencia evangélica no sería ajena a este clima de odio homófobo, que parece además estar en plena ebullición. Ya en 2010 recogíamos como múltiples instituciones del país (incluidos dos de los principales partidos políticos y diferentes líderes cristianos) se posicionaban con fuerza en contra de la homosexualidad como reacción al anuncio por parte del Gobierno sueco de que apoyaría a colectivos pro derechos humanos de Zambia, incluidos grupos LGTB.
Actualización (17/09/2013)
Desgraciadamente James Mwape y Philip Mubiana seguirán bajo custodia policial al haberse retrasado la celebración del juicio, cuyo inicio -como antes referíamos- se esperaba esta semana. Desde Amnistía Internacional se ha pedido ya la inmediata liberación sin cargos de los dos jóvenes, que entre otros malos tratos habrían sido sometidos al infame «reconocimiento anal» para demostrar su homosexualidad, práctica denunciada por organizaciones internacionales como una forma más de tortura.
Existe, por cierto, una petición internacional en la plataforma Care2 a favor de la liberación de Mwape y Mubiana, que lleva recogidas más de 36.000 firmas. Puedes sumarte pinchando aquí y cumplimentando el formulario.