Dos heridos en el asalto a la sede de una organización LGTB en San Petersburgo
Dos encapuchados asaltaron un acto de la organización LGTB LaSky en San Petersburgo armados de bates de béisbol y pistolas neumáticas. Dos de los asistentes a dicho acto tuvieron que ser hospitalizados, uno de ellos con una herida de bala de goma en el ojo, que se teme pueda perder. Los hechos ocurrieron tan solo un día después de que se celebrara por las calles de la ciudad rusa la anual “Marcha contra el odio”, a la que acudieron alrededor de 150 personas.
LaSky es una organización que presta asesoramiento y asistencia acerca del VIH. Este domingo 3 de noviembre celebraban en su sede un acto, al que habían acudido algunos invitados, cuando irrumpieron dos hombres enmascarados. Anastasia Smirnova, portavoz de seis organizaciones LGTB rusas, describía de urgencia los hechos mediante un mensaje en la página de Facebook de Russian LGBT Network:
“Los pogromos se han convertido en una realidad. Ya no son contra los emigrantes, sino contra la oficina de San Petersburgo de LaSky, la organización que se ocupa del VIH/SIDA para HSH. Dos hombres enmascarados y armados atacaron un acto de LaSky hace tan solo 40 minutos. La policía llegó al lugar y se fue de inmediato, diciendo que no había visto ninguna evidencia del crimen. Dos de los participantes en el acto han sido hospitalizados”.
Más tarde, desde la misma red social, los responsables de LaSky informaban más detalladamente de lo ocurrido:
«Alrededor de las 19:20 del domingo 3 de noviembre de 2013, el ‘Rainbow Café’ que se celebra tradicionalmente en el centro comunitario del proyecto Lasky-San Petersburgo fue atacado por dos asaltantes. Entraron en el centro comunitario pretendiendo estar ‘buscando un amigo’. Entonces uno de ellos sacó una pistola neumática y abrió fuego mientras que el otro blandía un bate de béisbol .
Dos personas resultaron heridas en el ataque. Un joven, que recibió un disparo en la cara y tiene una bala alojada en el ojo, fue llevado al hospital. Los médicos dicen que el pronóstico no es bueno, difícilmente podrá recuperar el ojo dañado. La segunda víctima fue una joven que resultó herida por el bate de béisbol.
‘Rainbow Café’ es un evento social semanal para la juventud LGBT y sus aliados heterosexuales, que tiene como objetivo apoyar la libre comunicación sin prejuicios de los participantes. Asistían a la última reunión unas 25 o 30 personas.
No es la primera vez que los grupos homófobos prestan atención en las redes sociales al proyecto LaSky-San Petersburgo y su prestación de servicios para la prevención del VIH y otras enfermedades de transmisión sexual en el colectivo HSH. Hace aproximadamente un mes varias páginas homofóbicas publicaban convocatorias de acciones contra el centro comunitario LaSky. El ataque de hoy es el resultado de la escalada del clima homófobo en la ciudad. Los que fomentan los sentimientos de odio por motivos de orientación sexual o identidad de género, incluyendo políticos y líderes religiosos, son los responsables. Este ataque dirigido a la oficina de la organización para la prevención del VIH y las ETS es un indicativo de que quienes deciden los pogromos están progresando, pasando de atacar a los activistas durante las manifestaciones callejeras a los ataques a eventos sociales privados en locales cerrados.
Los grupos de defensores de los derechos humanos de la ciudad están siguiendo este incidente con una gran atención y están presionando para que se lleve a cabo una investigación justa e imparcial de este crimen de odio homófóbo».
Cuando hablan de pogromos en sus declaraciones, sin duda hacen referencia a la manifestación que había tenido lugar veinticuatro horas antes por las calles de San Petersburgo. A las 10:30 del pasado sábado 2 de noviembre, comenzaba la decimocuarta “Marcha contra el odio”, convocada por distintas organizaciones para luchar contra la discriminación por razón de sexo, nacionalidad, religión u orientación sexual. El lema de este año era precisamente “Rusia sin pogromos”, siendo coreado por las al menos 150 personas que recorrieron las calles de San Petersburgo proclamando su rechazo a cualquier acto de violencia contra las minorías.
Y es que desde que se inició el proceso que desembocó en la aprobación de las leyes que prohíben informar positivamente sobre homosexualidad, bisexualidad o transexualidad, no han dejado de sucederse ese tipo de actos de violencia. Los jóvenes LGTB son violentamente agredidos, secuestrados, horriblemente torturados y en algún caso asesinados por bandas organizadas sin que las autoridades parezcan muy interesadas en evitarlo. Cualquier acto de defensa de los derechos LGTB se salda con violentos ataques por parte de contramanifestantes homófobos. En aplicación de las leyes homófobas, los activistas son detenidos y encausados simplemente por querer hacer respetar sus derechos. Los actos de protesta también se saldan con detenciones. Incluso las organizaciones LGTB son denunciadas o reciben avisos “preventivos” para que cesen en sus actividades. Una espiral de horror que parece no tener fin.