Muere el joven camerunés encarcelado en 2011 por declarar su amor por mensaje de texto a otro hombre
Jean-Claude Roger Mbédé, encarcelado por enviar a un conocido un mensaje de texto declarándole su amor, ha fallecido. Mbédé, de 34 años, murió el pasado viernes, un mes después de que su familia, la misma que lo despreciaba por su homosexualidad, se lo llevara del hospital en el que estaba siendo tratado debido a las complicaciones de una hernia que desarrolló en prisión, y una vez que el joven no pudo continuar afrontando los gastos del tratamiento. «Su familia dijo que era una maldición para ellos y que debíamos dejarlo morir«, ha declarado su abogada Alice Nkom, comprometida luchadora a favor de los derechos LGTB en Camerún.
Mbédé fue detenido en Yaoundé en marzo de 2011 después de enviarle a otro chico, identificado con las iniciales C.F., un mensaje de texto que decía “Estoy muy enamorado de ti». El receptor de dicho mensaje, lejos de rechazarlo cortésmente, lo denunció. Los gendarmes le tendieron una emboscada, acordando para ello con C.F. que invitaría a Mbédé a su casa esa noche. Cuando este llegase, los agentes lo sorprenderían y ello serviría como “prueba” de su homosexualidad. Mbédé fue finalmente detenido, acusado de “homosexualidad” y “tentativa de homosexualidad” y condenado a 36 meses de prisión (la sección 347 del Código Penal de Camerún establece que «el que tiene relaciones sexuales con una persona del mismo sexo será castigado con penas de prisión que van de seis meses a cinco años» e impone además fuertes multas).
En julio de 2012 el Tribunal de Apelación de Yaoundé le concedió la libertad provisional por motivos de salud, después de una dura estancia en prisión en la que sufrió agresiones y malos tratos y en la que entre otras cosas desarrolló una hernia de la que fue operado por primera vez al salir de la cárcel. Sin embargo, a pesar de la campaña para que se revisara su caso y no tuviera que volver a ingresar en prisión, el 17 de diciembre de ese mismo año el joven vio ratificada su condena. Amnistía Internacional lo declaró preso de conciencia, al considerar que fue condenado únicamente por su orientación sexual percibida. Algo que según esta organización contraviene una serie de tratados internacionales y regionales de derechos humanos suscritos por Camerún, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos o la Carta Africana de Derechos Humanos y de los pueblos.
Durante este intervalo de tiempo Mbédé permaneció en situación de semiclandestinidad, despreciado por su familia y cambiando de residencia varias veces por temor a una nueva detención que le obligase a completar su pena, al tiempo que su salud se iba deteriorando. Tras la primera operación, que no resolvió su problema, fue intervenido de nuevo a finales de 2013, operación que al parecer resultó fallida. Finalmente el joven se quedó sin dinero para continuar sufragando su estancia en el hospital y su familia, la misma que lo había rechazado cruelmente por ser homosexual, se lo llevó a su localidad natal, donde según lo afirmado por Alice Nkom lo dejó morir. «Yo acuso al estado. Si la homosexualidad no hubiera sido considerada delito, nunca hubiera ido a la cárcel y no hubiera muerto. Su vida se acabó en el momento en que ingresó en prisión», ha declarado la abogada.
Una situación de espanto para las personas homosexuales
Según la organización de defensa de los derechos LGTB Human Rigths Watch, al menos 28 personas fueron detenidas en Camerún por su condición homosexual en los últimos tres años, lo que le convierte en el país africano con más casos contra personas sospechosas de ser homosexuales (en dosmanzanas hemos recogido muchos de ellos).
Por desgracia, el caso de Mbédé es solo un ejemplo más del creciente aumento de la violencia homofóbica en el continente africano, donde la comunidad LGTB se expone a diario a multitud de situaciones de vulneración de sus derechos más básicos.
Entrevista a Roger
Sirva como modesto homenaje a Jean-Claude Roger Mbédé el reportaje que en su momento realizó sobre él la española Quijada Producciones como parte del proyecto PAEMH (Projet d’Assistance et d’Encadrement des Minorités Homosexuelles, una iniciativa de apoyo a las organizaciones LGTB que trabajan en Camerún financiado por la Unión Europea). El vídeo forma parte de la serie “Homosexuales en Camerún: gentes como tú y yo”, pequeños reportajes que recogen testimonios personales de personas LGTB de ese país y del que informamos hace varios meses.
Duele pensar cómo debieron ser los últimos días de Roger, sufriendo físicamente y rodeado de personas que lo despreciaban. Nosotros lo recordaremos como se muestra en este vídeo, valiente y orgulloso de los cientos de cartas de solidaridad que recibió de personas de todo el mundo. Casos como el suyo son los que nos motivan para seguir colaborando, muy modestamente y en la medida de nuestras posibilidades, a la lucha contra el odio homófobo y a favor de los derechos de las personas LGTB en todos los lugares del mundo.
Descansa en paz, Roger.
Otro glorioso aporte de los monoteísmos semitas en pro de la injusticia, el sufrimiento y la infelicidad humana. Descanse al fin en paz, y luchemos porque casos como el suyo no vuelvan a darse.
Iba a decir, ¿pues qué le pasará a estos africanos? Pero ya respondió Cavernarius, sólo me queda expresar mi indignación, por si pudiera servir de algo.
Una desgracia contra la que hay que luchar. Si esto se permite puede convertirse en un calvario continuo para la gente. RIP.