Oklahoma: presentado proyecto de ley para prohibir todo tipo de matrimonios y evitar así los enlaces entre personas del mismo sexo
Mike Turner, congresista republicano de la Cámara de Representantes de Oklahoma, ha presentado un proyecto de ley para prohibir cualquier forma de matrimonio en el estado. El objetivo del proyecto sería impedir que los enlaces entre personas del mismo sexo tengan lugar en Oklahoma si la Corte Federal de Apelaciones suscribe la sentencia del juez Terence C. Kern, que el pasado 14 de enero declaró inconstitucional la limitación del matrimonio a las parejas del mismo sexo recogida en las leyes del estado.
Crece el temor entre las filas más conservadoras a que la Corte Federal de Apelaciones de Denver, que debe decidir sobre las sentencias, ahora en suspenso, que abrieron el matrimonio igualitario en Utah y Oklahoma, sea favorable a los derechos LGTB. La decisión de la Corte Federal de Apelaciones de San Francisco respecto a la ilegalidad de rechazar a un jurado por razón de su orientación sexual, otorgando a esta el mismo grado de protección contra la discriminación que al sexo o la raza, no ha hecho más que aumentar esa inquietud.
Pero lo que no cabía esperar es que el grado de fanatismo homófobo llegara al punto de querer erradicar la figura misma del matrimonio antes que permitir su disfrute a las parejas del mismo sexo. Así lo ha hecho el republicano Mike Turner, presentando en la Cámara de Representantes de Oklahoma un proyecto de ley que prohibiría la celebración y reconocimiento de cualquier matrimonio en el estado. La iniciativa tiene el formato denominado “shell bill”, es decir, un proyecto de ley sin apenas contenido que puede enmendarse en cualquier momento según las circunstancias. El objetivo de Turner, pues, sería modificarlo a conveniencia, o incluso retirarlo, según lo que dicte la Corte Federal de Apelaciones de Denver en su momento.
Según Mike Turner, sus electores “están dispuestos a discutir acerca de si el matrimonio debe ser regulado por el estado”, estimando además que la opción de abandonar en Oklahoma el reconocimiento del matrimonio civil es “sin duda una opción realista y algo que debería formar parte del debate”. Turner afirma tener el apoyo de otros representantes conservadores, que mantendrían idéntico punto de vista.
Para Ryan Kiesel, director ejecutivo de ACLU (American Civil Liberties Union, organización de defensa de los derechos civiles de las minorías) en el estado, estos representantes “están totalmente fuera de contacto con los ciudadanos de Oklahoma”, y cree que en el futuro este tipo de reacciones serán cada vez más escasas. Según Kiesel, la ACLU ha sido incapaz de encontrar un estado que haya erradicado completamente el matrimonio.
En todo caso, la idea de arrebatar a todos los ciudadanos un derecho con el fin de que una minoría no pueda disfrutarlo no sería novedosa en Oklahoma. Cuando la autoridad federal obligó a los estados a que ofrecieran a los miembros de la Guardia Nacional legalmente casados con una persona de su mismo sexo los mismos beneficios establecidos para cualquier matrimonio, la gobernadora Mary Fallin decidió suprimir todos esos beneficios para todas las parejas casadas, incluidas las de distinto sexo, antes de verse obligada a ofrecérselos a los miembros de un matrimonio homosexual.