El viceprimer ministro ruso afirma que los homosexuales no tienen nada que temer siempre que «no toquen a los niños»

El viceprimer ministro ruso, Dmitry Kozak, ha relacionado una vez más la homosexualidad con la pederastia en una conferencia de prensa que tuvo lugar el pasado 4 de febrero en Sochi ante los medios de comunicación internacionales, tan solo unos días antes del inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno. Según Kozak, los atletas y visitantes homosexuales no tienen nada que temer durante su estancia en territorio ruso, siempre que “por favor, no toquen a los niños. Es la única condición”. El secretario general de la ONU, por su parte, invitaba a los miembros del Comité Olímpico Internacional a luchar contra la homofobia.

El viceprimer ministro aseguraba que en Rusia “no se distingue a las personas en función de su religión o su orientación sexual», añadiendo que “todos somos adultos, y cualquier adulto tiene el derecho a que se acepte su actividad sexual. Pero por favor, que no toquen a los niños. Es la única condición. Durante la ceremonia de apertura, durante la ceremonia de clausura, durante los eventos deportivos, espero no ver este tipo de problemas”.

Las palabras de Dmitry Kozak insisten en ligar homosexualidad con pederastia, una maniobra que el presidente Vladimir Putin ya ha utilizado en varias ocasiones. En una reunión con los voluntarios olímpicos, Putin afirmó que los visitantes homosexuales podían sentirse “tranquilos y cómodos” durante su permanencia en la ciudad olímpica sin sufrir ninguna discriminación, pero enfatizó que “deben dejar en paz a los niños”, recordando que las leyes vigentes en Rusia prohíben que puedan expresar sus puntos de vista sobre los derechos LGTB ante menores. El mismo argumento utilizó en sus declaraciones a BBC One, en las que arguía que las leyes contra la “promoción de relaciones sexuales no tradicionales ante menores” no pretendían socavar los derechos de las personas LGTB, sino proteger a la infancia.

Ban Ki-moon invita al COI a luchar contra la homofobia

El mismo día 4 de febrero en Sochi, el secretario general de la Naciones Unidas, Ban Ki-moon, se reunía con los miembros del Comité Olímpico Internacional (COI). Ki-moon aprovechó la ocasión de este encuentro para invitar al COI a unirse contra la discriminación de las personas LGTB, aún sin referirse directamente a las leyes homófobas vigentes en Rusia, país anfitrión de los próximos Juegos Olímpicos de Invierno.

El secretario general recordó a los asistentes que el pasado mes de diciembre se celebró en las Naciones Unidas el día de los Derechos Humanos, que en esta ocasión se dedicó a la lucha contra la homofobia en el deporte. “Muchos atletas profesionales, homosexuales y heterosexuales, están hablando en contra de los prejuicios. Todos debemos alzar nuestras voces en contra de los ataques contra lesbianas, gays, bisexuales, transexuales o intersexuales», afirmó en su discurso.»Hay que oponerse a las detenciones, los encarcelamientos y las restricciones discriminatorias a las que se enfrentan», concluyó.