Las imágenes de una brutal agresión a una joven transexual, reflejo de la precaria situación de este colectivo en Honduras
Terrible agresión la sufrida por Darwin René Reyes, conocida también como Mónica Shakira, una joven trabajadora del sexo transexual de San Pedro Sula, en Honduras. Un país en el que la violencia más brutal contra las personas LGTB no solo está a la orden del día, sino que en la mayoría de las veces queda impune. Esta vez, sin embargo, las imágenes de la agresión fueron captadas y difundidas por Canal 6, causando un gran impacto en el país. El agresor principal es Rolando Medina, médico de profesión, aunque la joven fue también maltratada por un miembro de la policía militar.
Según ha explicado la mujer, Rolando Medina y un acompañante que se encontraba con él en el interior del coche fueron los que comenzaron a agredirla después de ofrecerle sus servicios. “Le ofrecí mis servicios a él y me dijo que estaba bien y de presto empezaron a insultarme y a golpearme ellos y yo tuve que defenderme”, ha declarado. Mónica Shakira Reyes niega, como los medios habían difundido al principio, haberle llegado a prestar sus servicios o haber estado en el interior del coche.
La grabación de lo sucedido muestra como en un determinado momento apareció una patrulla de la policía militar. «Ellos me golpearon; incluso los policías también me golpearon. En vez de defenderme ellos más bien me golpearon”, ha contado Reyes, que llegó a temer por su vida. «Ya me tenían en la paila del carro de los militares para llevarme no sé adónde, pero me logré bajar”, añadía. De hecho, en la grabación se observa a la perfección como uno de los militares le propina una patada a la mujer.
La policía militar acaba por desaparecer y Rolando Medina -acompañado en algunas de las imágenes por su acompañante- remata de forma brutal la agresión a Reyes, lanzándola con gran violencia contra el suelo y dejándola visiblemente conmocionada por el fuerte golpe en la cabeza que bien hubiera podido matarla (advertimos de la dureza de las imágenes, sobre todo en la parte final del vídeo):
Medina se justifica y afirma que él «no es gay»
Rolando Medina culpabiliza a Mónica Shakira Reyes de lo sucedido. Según su versión, el coche que conducía sufrió una avería en el lugar en el que sucedieron los hechos. Mientras esperaba que le remolcaran, Reyes se le acercó y le ofreció sus servicios, que él rechazó. Medina asegura que como respuesta la mujer rompió el cristal de su coche, lo que hizo que él «se defendiera» (ella ha confirmado que efectivamente lanzó bloques al coche, pero ya cuando había empezado la agresión).
Sobre la intervención de la policía militar, Medina asegura que «se bajaron del vehículo y me preguntaron qué fue lo que pasó; les mostré el vidrio roto y les expliqué (…) Los militares me llaman y ya estaban con el travesti y me notificaron que nos tenían que llevar a los dos. Me dicen ‘te rompió el vidrio porque no le pagaste….’. Yo me molesté y les pedí pruebas porque mi carro estaba varado, con el tonó abierto. En lo que me subo al carro de los militares, el homosexual me empezó a golpear y yo lo empujo. Trataron de calmarme y fue cuando el homosexual empujó al militar, que le respondió con una patada. Ellos se fueron, como ven en el video, y el tipo quedó agrediéndome. Eso es lo que se ve en el video. En ningún momento lo molesto o lo ataco yo primero. Él insistió y me enojó, al extremo que no pude hacer más que defenderme. Solo me defendí de la agresión, pero nunca fue un ataque homofóbico ni machista”.
Antes de dar esta explicación, Medina llegó a dejar un mensaje en Facebook, según el cual parece que una de sus principales preocupaciones es que alguien pensara que es gay. «Bueno gente les voy a hacer un favor, haciendo una declaración una para agradecer a mi gente por preocuparse por mí y otra para tranquilizar a la mara sapa, para alimentar su hambre de chambre. Uno esto ni tengo que declararlo jajajaj porque es claro que no soy gay. No hay nada de malo en eso, pero bueno no es lo mío. Si lo fuera (que ese no es el caso) no ocuparía andar levantando todo tipo de gente en la primera calle…», escribía. «Podrá ser un homosexual, pero es un hombre y tuvo los huevos de atravesar el carro con bloques. Me da igual lo que se piense… tengo esa cualidad no tengo cola que me pisen de homosexual y contratar prostitutos, tengo mucha fama, pero no de eso», añadía después.
Investigación del Gobierno
Lo cierto es que las imágenes de la agresión han causado un gran revuelo en Honduras, hasta el punto de que el propio presidente del país, Juan Orlando Hernández, ha ordenado que se investigue la actuación de la policía militar. El comandante Germán Alfaro ha asegurado que los integrantes de la patrulla ya están identificados y se enfrentan a una acusación de denegación de auxilio, aunque asegura que el que propinó la patada a Mónica Shakira Reyes no es propiamente un policía militar, sino un soldado que cumplía «funciones administrativas de cuidar los bienes incautados».
Por lo que se refiere a la víctima de la agresión, ha sido evaluada de sus lesiones, y según han denunciado algunas asociaciones que le prestan ayuda ha recibido llamadas amenazantes. Josué Elías Hernández, del Centro de Educación y Prevención en Salud, Sexualidad y Sida (CEPRES) asegura que si algo demuestra lo sucedido es que los militares desconocen los derechos humanos y aplican la fuerza contra los ciudadanos. Hernández ha confirmado también que además de ante la fiscalía presentarán denuncia ante el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos junto a otras organizaciones de defensa de las personas LGTB.
Honduras, un infierno para las personas LGTB
Lo cierto es que Honduras arrastra un terrible historial por lo que al respeto de los derechos LGTB se refiere, situación que empeoró tras el golpe de estado de 2009. En dos manzanas hemos recogido algunos episodios, como la muerte del activista LGTB Walter Tróchez en diciembre de 2009 tras recibir una paliza por los que se sospecha eran miembros de la Dirección Nacional de Investigación Criminal o el asesinato de los también activistas Wilmer García Alvarado y Erick Martínez Ávila en septiembre de 2010 y en mayo de 2012. Pero no solo han sido asesinados activistas. A Jonathan José Pineda un guardia de seguridad homófobo lo mató de un disparo a plena luz del día en febrero de 2012. José Enrique Castro (a quien la prensa se refería a veces como gay y a veces como travesti) apareció asesinado a balazos en marzo de 2012. Marlon Javier Jiménez, una joven trans, fue secuestrada de su domicilio y asesinada en agosto de 2012. Los tres tenían solo 22 años.
Por desgracia, son solo algunos ejemplos. En 2012 recogíamos precisamente un estudio realizado por la Red Lésbica Cattrachas que arrojaba un total de 71 asesinatos de personas LGTB en Honduras desde septiembre de 2008 a febrero de 2012. Informaciones posteriores incrementaban ese número hasta cerca del centenar de casos. Y lo que está claro es que de todas las personas LGTB de Honduras las que se encuentran en una situación más vulnerable son las mujeres transexuales trabajadoras del sexo, como Mónica Shakira Reyes.
En su caso, al menos, la agresión que ha sufrido ha podido ser conocida y sus autores identificados. Esperamos que se haga justicia, y que además el impacto causado sirva para mejorar aunque sea solo un poco la terrible situación de este colectivo.