El Día de Salir del Armario, una fecha para reivindicar la importancia de la visibilidad
Este 11 de octubre celebramos de nuevo el Día de Salir del Armario. Con origen en los Estados Unidos, el allí conocido como «National Coming Out Day» conmemora la multitudinaria marcha a favor de los derechos civiles LGTB que tuvo lugar en Washington el 11 de octubre de 1987.
En España, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales ha aprovechado la jornada para reclamar a las administraciones la protección necesaria para que las personas puedan salir del armario, «un activo para su bienestar y su salud». La FELGTB hace alusión en su comunicado a una investigación del Centro de Estudios sobre el Estrés (Centre for Studies on Human Stress, CSHS), afiliado a la Universidad de Montreal, según la cual las personas fuera del armario presentaban menos ansiedad y depresión y se mostraban más felices, saludables y satisfechos con su trabajo.
Según aquel estudio, que en su momento recogió dosmanzanas, gays, lesbianas y bisexuales fuera del armario para familiares y amigos presentan menos síntomas de índole psiquiátrica y menores niveles de estrés que aquellos que mantienen su orientación sexual en secreto (un resultado por cierto similar al de estudios anteriores). Una segunda conclusión, sin duda más sorprendente, es que los hombres gays y bisexuales presentarían menos síntomas de depresión, menores niveles de estrés y un mejor estado físico que los heterosexuales. Un resultado que contradice la hipótesis de que la homosexualidad lleva asociada una carga extra de estrés y problemas de salud, basada en el hecho de que los pertenecientes a minorías suelen padecer peor salud que los miembros de grupos mayoritarios.
Los propios responsables del estudio se declararon entonces sorprendidos por este resultado, y a falta de profundizar en la cuestión con nuevos estudios, sugirieron, por una parte, que los mecanismos de defensa y de superación adquiridos al vivir de forma visible una orientación sexual estigmatizada podrían contribuir a una mayor resiliencia, y por otra que los hombres gays suelen cuidarse más que los heterosexuales, con una mejor dieta y más ejercicio físico.
La FELGTB recuerda sin embargo que la visibilidad está condicionada por el miedo: «Según un estudio de COGAM, entre las y los jóvenes LGB de entre 12 y 17 años, el 80% oculta su orientación sexual en clase por miedo al rechazo. Este dato resulta preocupante, sobre todo si se cruza con el estudio realizado por Human Rights Campaign entre 10.000 adolescentes que prueba que cuanto más se muestra fuera del armario, mayores niveles de felicidad reconocen». El estudio de COGAM al que se refiere la nota de la FELGTB es Homofobia en las aulas: ¿Educamos en la diversidad?, una investigación llevada a cabo durante el curso 2012/2013 en 37 centros educativos de la comunidad de Madrid, al que nos referimos hace unos meses y que puedes descargar pinchando aquí.
«En el ámbito profesional, la reforma laboral reduce la protección de los trabajadores y trabajadoras. Esto supone también un factor de riesgo al que se enfrentan las personas homosexuales y bisexuales a la hora de visibilizar su orientación sexual, por miedo al rechazo», añade la nota de la FELGTB. No es de extrañar por otra parte este miedo, si se tienen en cuenta diversos estudios realizados en Estados Unidos (y no hay razón para que no suceda lo mismo en otros lugares) muestran que en condiciones de igual preparación, o incluso de objetiva superioridad, las personas que eran percibidas como LGTB tenían menos posibilidades de ser seleccionadas, una discriminación difícil de combatir, pues se camufla bajo el velo de las preferencias para dar paso a unos currículos sobre otros.
En palabras de la presidenta de la FELGTB, Boti García Rodrigo, «si tenemos que estar con preocupación continua porque el mundo no sepa quiénes somos, acabamos perdiendo nuestra autoestima y nuestra valoración como personas. La visibilidad nos permite estar en el mundo y manifestarnos como lo que somos, y contribuye a hacernos más felices y a estar saludables. Salir del armario no es una cuestión menor y las administraciones deberían garantizar el derecho de cualquier persona a hacerlo cuando lo estime oportuno”.
¿Recuerdas tu salida del armario? ¿Cómo cambió tu vida? ¿Saliste a la vez en todos los ámbitos o lo hiciste de forma escalonada? ¿Hay ámbitos de tu vida en los que aún no eres visible como persona LGTB? Déjanos tu testimonio, si crees que puede ayudar a otras personas.
El Cardenal Burke dice que las parejas gays no deben ser invitadas a reuniones familiares en presencia de niños
http://www.ragap.es/actualidad/gente/el-cardenal-burke-dice-que-las-parejas-gays-no-deben-ser-invitadas-a-reuniones-familiares-en-presencia-de-ninos/875065
Nunca fui consciente de vivir en un armario durante mi infancia. Viví mi bisexualidad como parte de mí. Salí del armario durante la adolescencia con mis amigos y amigas. Mi familia lo aceptó a los 20 años. Trabajo con, por y para mujeres y creo que NUNCA saldré del armario. No estoy estresada ni frustrada. Separo mi ámbito personal del profesional, al fin y al cabo, tampoco conocen mis gustos en materia gastronómica. Si me vieran por la calle con una pareja femenina no le daría importancia.