La ciencia puede ser divertida con Jesse Bering
Jesse Bering es columnista de la revista de divulgación científica Scientific American. Abiertamente homosexual, suele tratar la homosexualidad en su columna y recientemente reseñaba varios estudios que examinaban la relación entre homofobia y homosexualidad reprimida.
El artículo comienza con una introducción en la que relata en primera persona y con sentido del humor cómo empezó de pequeño a utilizar expresiones homófobas para ocultar su homosexualidad, técnica que nunca terminó de ser convincente, según explica, por su temperamento ‘poco hostil’.
De su experiencia personal pasa a resumir las líneas de investigación que defienden la teoría de que un porcentaje de jóvenes homófobos puedan realmente albergar deseos ocultos por personas de su mismo sexo. El más antiguo de los artículos es de la Universidad de Georgia, data de 1996, y sus autores son Henry Adams, Lester Wright Jr. y Bethany Lohr. Este estudio se basa en los datos obtenidos con 64 chicos que se autodefinían como heterosexuales, de unos 20 años de media. Se utilizó un cuestionario para dividirlos en dos grupos, ‘homófobos’ y no ‘homófobos’. Se les conectó a un aparato que medía el grado de erección de su pene y se les expuso a vídeos con escenas de sexo heterosexual, lésbico y homosexual. Sólo los homófobos sufrieron un aumento de la circunferencia de su pene en respuesta al porno gay. Los resultados de este estudio no explican si el recurso a la homofobia para mitigar deseos ‘prohibidos’ es un recurso consciente como en el caso del joven Jesse Bering o si se trata más bien de algo inconsciente.
Un artículo de Brian Meier en 2006 rebatía los resultados obtenidos por Adams, Wright y Lohr, asegurando que las erecciones homófobas no se debían a excitación sexual, sino al nerviosismo y la ansiedad que les producían las imágenes. Bering no esta de acuerdo ya que, aún admitiendo que un ‘escenario’ de peligro o estrés pueda aumentar la libido (lo de las películas de hacerlo mientras el edificio está en llamas), el estrés o el miedo escénico no justifican por sí solos una erección. ‘Espero que no sea así –confiesa-, porque me produce ansiedad hablar en público y sólo hace falta tener que preocuparme de una posible erección en mi conferencia de mañana’.
Aunque el artículo tiene ya algunos años y sus aportaciones no hicieran más que refrendar algo que intuíamos, la columna de Jesse Bering lo rescata con un aire fresco y audaz, lo que escuece a más de uno. No tienen desperdicio los comentarios de los lectores de la revista, algunos de ellos tan profundamente homófobos que da cierta pena encontrarlos en una revista de divulgación científica, pero lo cierto es que les dan bastante caña entre todos. Os recomiendo leerlos, están en inglés, pero se siguen con facilidad.
asi que cuando un homofobo nos insulta en realidad es su forma de decirnos inconscientemente que le gustaria echar un polvo con nosotros…no se no se…, puede que sea asi, pero tendremos que ir con cuidado no sea que nos insinuemos y se de cuenta de que le ponemos despues de habernos arreado una par de viajes
Lo que nos faltaba ahora resulta que los homofobos somos los homosexuales!! Hemos pasado de ser maricones a ser homofobos. A la pues…ya sabeis, no critiqueis a los homofobos, q son solo acomplejados con problemas de autoaceptación.Ah! y porsi no lo sabiais los del kukuxclan eran negros!!
leer el artículo cuesta 31.50 dólares… alguien se lo ha descargado y lo quiere compartir?? estoy realmente interesado en leerlo
vale
me he precipitado, parece que sólo el último artículo es el de pago… da igual si alguien lo ha pagao que lo comparta please
Pues yo no me excito ante situaciones peligrosas…. no sé de dónde han sacado eso. Quizá haya gente que sí, creo recordar que existe gente sadomasoquista.
justo lo que los homofobos estan esperando para ponerse cachondos: que les llamemos ¡MARICONES!
Ya lo dije una vez y lo repito: si la homofobia encubriese una homosexualidad no asumida la tortilla daría la vuelta y los (supuestos) heteros de golpe y porrazo se convertirían en la minoría sexual por excelencia, no nosotros. Esa teoría me sirve para algunos casos muy concretos, pero no para la mayoría. Tratar de generalizar (y simplificar) éste tema de esa manera me parece un disparate. El fenómeno de la homofobia es algo bastante más complejo que eso. Apoyo en parte el comentario (sorprendentemente muy mal valorado: quizá sea por el tono, no lo sé) de Nineu(Amets bat).
Charlie, Sientific American es una revista como ‘Muy interesante’, más o menos, es decir, tampoco es completamente seria. Es, como has dicho tú, una simplificación, pero entretenida.
Que sí que es verdad que la materia es compleja, pero ¿por qué no podemos echarnos unas risas a costa de los homófobos, hoy que es domingo? Y mañana ya volvemos a ponernos serios.
Pues me vais a permitir que yo haga de abogado del diablo.
Evidentemente, sacar de este estudio la conclusión de que «todos los homófobos son homosexuales» sería un disparate mayúsculo. En el propio artículo se señala, en primer lugar, que los jóvenes que se sometieron a la prueba eran sólo 64, número nada significativo para cualquier estudio estadístico que se precie. Por otro lado, también señala que el estudio fue contestado por Meier con el argumento de la situación de miedo, etc…
Pero eso no quita para que sí sea cierto que hay homosexuales homófobos, gente que es homosexual y no quiere serlo, una de cuyas reacciones ante esa contradicción es precisamente el rechazar de plano todo lo que tenga que ver con la homosexualidad. E incluso hacer suyo el discurso heterosexista más reaccionario. ¿De dónde salen si no todos los que se someten a terapias para «curarse» la homosexualidad? ¿De dónde salieron si no Rodigo de Santos y tantos otros?
Se llama homofobia interna y claro que existe. De hecho, creo que la propia palabra «homofobia» se creo para definir estos casos.
Por cierto, Charlie, yo creo que el mensaje de Nineu ha sido valorado negativamente no tanto por las formas, sino porque le ha dado la vuelta a la tortilla. Ha interpretado (o eso parece) no que los homófobos sean homosexuales (que, dicho así en general, ya digo que sería un disparate), sino pero aún, que los homosexuales son homófobos.
Crasamet, perdona pero nose de donde sacas esa interpretacion («Ha interpretado que los homosexuales son homófobos») de mi texto. Pero por aclarar q igual no se entendio estaba siendo ironico con este texto:
«A la pues…ya sabeis, no critiqueis a los homofobos, q son solo acomplejados con problemas de autoaceptación.Ah! y porsi no lo sabiais los del kukuxclan eran negros!!»
Es decir considero q los homofobos es su inmensa mayoria son heteros, lo cual no quita que haya personas LGBT con homofobia interiorizada.Al igual q hay mujeres machistas. Con esos estudios me parece que se intenta trasladar q la homofobia es un asunto simplemente de autofobia nuestro. Lo cual me parece tremendamente grave.