Uno de cada seis psiquiatras británicos han intentado «curar» la homosexualidad
Parece increíble, pero según una investigación publicada en la revista científica BMC Psychiatry, uno de cada seis psiquiatras y/o psicoterapeutas británicos afirman haber aplicado en algún momento «terapias para curar» la homosexualidad.
La investigación es el fruto de un cuestionario cumplimentado por cerca de 1.400 profesionales. Según Michael King, su autor principal, «apenas hay evidencia de que una terapia pueda realmente cambiar la orientación sexual de una persona. Resulta por tanto sorprendente que una minoría de profesionales signa ofertando este tipo de ayuda a sus clientes».
El estudio matiza que aunque un 17% de los profesionales hayan recurrido a estas técnicas, «sólo» un 4% se muestran dispuestos a usarlas en la actualidad. Entre los métodos utilizados están, por ejemplo, las terapias aversivas, basadas en asociar imágenes que puedan despertar el deseo homosexual a descargas eléctricas.
Entre las razones que dan para defender estas prácticas se encuentran tanto razones morales o religiosas como el deseo de «ayudar a los pacientes que se sienten afectados por la discriminación». Un psiquiatra, incluso, ha llegado a defenderlas como una forma de luchar contra el VIH. El estudio pone además de manifiesto el grado de ignorancia existente entre estos supuestos profesionales sobre su propia disciplina. «Hoy día, la forma de abordar la problemática de estos pacientes es ayudarles a ajustar su vida a su situación, a valorarse como personas, y mostrarles que no hay nada patológico en su sexualidad», afirma King.
Para consultar el estudio completo (en inglés), pincha aquí.
Tremendo 🙁
«Aquilinos» hay en todas partes, por desgracia
Pobres chic@s.
Quién necesita curarse con los psiquiatras.
Podían entretenerse soltando descargas eléctricas a los homófobos mientras les enseñan vídeos de agresiones a gays o insultos en los colegios.
Es especialmente vergonzoso viniendo de un país supuestamente avanzado en el respeto a las minorías sexuales como es el Reino Unido. Me da miedo pensar en lo que pueda estar ocurriendo al otro lado del Atlántico.
Pues a mi me lo hicieron, lo que pasa es que el «doctor» se pasó con la palanca y me convertí en drag queen. A lo mejor voy otra vez, pero llevo a mi madre, para que le curen se su afición a las sevillanas y la conviertan en Cher.