Ascienden a sargento a un policía presuntamente sexista y homófobo
El mes de febrero, dos mujeres policías locales de la ciudad de Torrejón de Ardoz denunciaron por discriminación y trato vejatorio al cabo Manuel Corballo. El gobierno del PP de esta localidad madrileña cambió de turno al cabo pero se negó en rotundo a sancionarle. El portavoz de CC.OO. de Torrejón afirmó por aquel entonces que el cabo era “un mando al que se protege al que desde el consistorio se pretende promocionar”. Corballo fue acusado de llamar “bollera” a una de las agentes y de afirmar “voy a tener otro cachorro de las Nuevas Generaciones para darles a éstos» (en referencia a las personas homosexuales). Además este agente era conocido por ser uno de los integrantes del comando de “los herméticos”, grupo de policías conocidos por sus actitudes machistas y homófobas.
Al no abrírsele expediente, el cabo se presentó a las oposiciones a sargento que celebró el Ayuntamiento de Torrejón, quedando en segundo lugar. Así el 27 de marzo el concejal de administración le concedió el ascenso de cabo a sargento. Lo cierto es que hay un malestar en la policía local de Torrejón y ya ha habido varios escándalos, llegando el portavoz del PSOE en el consistorio a afirmar que “parece que las actuaciones de este cuerpo [especial de seguridad de la alcaldía] no siempre han estado rodeadas de la más escrupulosa legalidad, ya que podrían haber hecho actuaciones para las que no tienen competencias”.
Y el PP detrás como siempre!
Esto es lo que se llama PP madrileño en estado puro!!
Mientras los votemos…
Se tendria que exiguir ver los exámenes de las oposiciones.
Todos los políticos cuando consiguen el poder protejen a quién ellos considerán que pueden serles útil.
Es una verguenza más típica de una república bananera que de una democracia occidental.
Vamos a ver, si este individuo se ha presentado a unas oposiciones para promoción interna y las ha aprobado, los demás no tenemos nada que decir de eso. Yo, de hecho, me presenté a dos y aprobé ambas.
Lo que sí es criticable es que, en su día, no se le hubiera abierto un expediente disciplinario por su comportamiento, lo cual no le habría permitido opositar.