El presidente de Burundi firma la ley que castiga la homosexualidad con cárcel
Los peores augurios se han confirmado. Burundi, un país africano (en este caso de mayoría católica) se une por primera vez en su historia a la larga lista de países que castigan las relaciones homosexuales con pena de hasta dos años de cárcel. Su presidente, Pierre Nkurunziza, firmó la ley el pasado día 22, de forma discreta y sin avisar. Se pone así punto final a un proceso del que hemos informado en dos manzanas, que comenzó con la aprobación de la ley por la Asamblea Nacional de Burundi y su posterior rechazo por el Senado debido a las presiones de organizaciones de derechos humanos.
Tras este rechazo, el propio partido del Gobierno se encargó de organizar multitidinarias manifestaciones contrarias a la homosexualidad. Al parecer la Asamblea Nacional votó despúes rechazar el veto de Senado, y finalmente ha sido este voto en que ha prevalecido.
Organizaciones de Derechos Humanos, como Human Rights Watch y Amnistía Internacional, han anunciado que no se quedarán impasibles y continuarán su lucha contra la nueva ley, que según ellos viola la propia Constitución de Burundi, que reconoce explícitamente el derecho a la privacidad, así como diversos tratados internacionales suscritos por ese país, como la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos o el Convenio Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos.
Aquí un ejemplo para los que digan que el catolicismo es más benigno que el islamismo. Si al catolicismo le dan alas vuelve la santa Inquisición.
Pobre africa. Ya tenían ellos bastante para soportar y luego llega el hombre blanco y les jode a base de colonizacion.
Se acaba la colonizacion dejandolo todo manga por hombro, y medio continente inflamado en guerra, y ahora tienen que soportar la podredumbre moral que son los extremismos religiosos, del que la secta católica es uno mas.