El Gobierno laborista australiano rechaza aprobar una ley de uniones civiles para parejas del mismo sexo
La derrota a finales de 2007 del ex-primer ministro conservador australiano, John Howard, conocido por sus convicciones homófobas, frente al candidato laborista Kevin Rudd, trajo esperanza a los colectivos LGTB de aquel país de que sus derechos civiles conocerían un fuerte avance. Nada más lejos de la realidad. El Gobierno laborista de Rudd ha rechazado aprobar una ley de uniones civiles para todo el territorio australiano similar al Partnership británico con el argumento (manifiestamente improcedente en este caso) de que «existe una amplia visión en la comunidad de que el matrimonio es entre un hombre y una mujer» .
El Gobierno australiano, eso sí, ha manifestado su intención de reconocer y ayudar a las parejas del mismo sexo y a sus familias a través de la reforma de diversas leyes federales.
Hasta el momento, el reconocimiento jurídico de las parejas del mismo sexo en Australia ha quedado relegado a la jurisdicción de los estados que la componen, existiendo una gran heterogeneidad, que parece seguirá siendo la norma. En la capital federal, Camberra, existe por ejemplo una ley de uniones civiles. Otros estados tienen simplemente registros de parejas de hecho, y otros solo reconocen de facto las uniones del mismo sexo. Las parejas del mismo sexo pueden adoptar conjuntamente en Camberra y en Australia Occiodental, pero no en el resto de los estados.
Los colectivos LGTB australianos han manifestado su profunda decepción, señalando además que, en contra de la opinión manifestada por el Gobierno, las encuestas sí muestran un apoyo mayoritario de los australianos al matrimonio entre personas del mismo sexo.
¿Desde cuando una mayoria es lícita para decidir los derechos de los demás?.
En fin, otro partido mas pendiente de los votos que de las personas. Nada nuevo bajo el sol.