Eurovisión 2009 en dos manzanas: Serbia

Volvemos al corazón de los Balcanes. En concreto a Serbia, capital Belgrado, país que cuenta en la actualidad con algo más de once millones de habitantes. Pueblo eslavo, convertido al cristianismo ortodoxo en la Edad Media. Su lengua, el serbio, es de hecho la misma que el croata, con mínimas variantes, aunque por lo general usa el alfabeto cirílico en lugar del latino. Existe además una significativa minoría húngara en la provincia de Voivodina (la provincia de Kosovo, poblada mayoritariamente por albaneses, es ya un estado independiente para la mayoría del mundo). Precisamente tras su derrota en la batalla de Kosovo, allá por el siglo XIV, los serbios quedaron sometidos al Imperio Otomano, del cual no obtuvieron la independencia hasta el siglo XIX, con ayuda de Rusia, su aliada incondicional. Serbia se enfrentó entonces al Imperio Austrohúngaro por el control de Bosnia-Herzegovina. El asesinato en Sarajevo del heredero austrohúngaro a manos de un nacionalista serbio supuso, de hecho, el arranque formal de la 1ª Guerra Mundial. Al finalizar ésta, serbios, croatas y eslovenos constituyeron un único estado, que acabó dando lugar a Yugoslavia, entidad que, salvo el paréntesis de la ocupación alemana, se mantendría hasta el derrumbe soviético, en que las tensiones nacionalistas acabaron por desgarrarla. El nacionalismo serbio de Slobodan Milošević y su decisión de anular la autonomía de Kosovo en 1989 marcaron el inició de una época negra para el país, empeñado en defender a sangre y fuego las posiciones serbias en las repúblicas ex-yugoslavas que se iban desgajando. Aunque eso supusiera contribuir a la peor limpieza étnica vista en Europa desde la 2ª Guerra Mundial… La realidad, sin embargo, es tozuda, y la actitud de los gobernantes serbios acabó relegando a su país al papel de paria de los Balcanes, del que poco a poco lucha por salir.

En el plano jurídico, las relaciones homosexuales fueron despenalizadas en Serbia en 1994. La edad de de consentimiento es la misma que la de las relaciones heterosexuales desde 2006. Y aunque al parecer existen regulaciones antidiscrimatorias, la realidad social de las personas LGTB es muy dura: la homofobia social es elevada, y el acoso a las personas LGTB visibles está a la orden del día. Los intentos de agresión a los activistas que año tras año intentan celebrar el Orgullo en Belgrado son bien conocidos (las brutales imágenes de lo ocurrido en 2001 ponen los pelos de punta). No existe reconocimiento jurídico de las parejas del mismo sexo. No es posible el acceso de las lesbianas a la inseminación artificial ni regulación de la modificación registral de las personas transexuales. Oficialmente los homosexuales tiene vetado, además, el acceso al Ejército.

Es difícil acceder a recursos LGTB locales en otra lengua que no sea el serbio. Un portal que ofrece alguna información es Gay Serbia. Entre las organizaciones y/o iniciativas LGTB serbias que podemos mencionar están Queer Beograd, Queeria centar, Gay Straight Alliance, Koalicija protiv diskriminacije o Transserbia.

Y la canción representante de Serbia en Eurovisión es…

«Cipela», interpretada por Marko Kon & Milan Nikolic.

Pese a lo que pudiera parecer, no se trata de una reunión imposible entre Kepa Junquera y Pino d’Angio, pero si te preguntas cómo hubiera podido ser en caso de haberse producido, tendrás que ver las semifinales.

Flick / elputojacktwist