La iglesia de Escocia cede ante su sector más conservador y no ordenará por el momento más pastores gays
La ordenación como pastor de la iglesia de Escocia de Scott Rennie, de la cual informamos este mismo fin de semana, será por el momento la última ordenación de un gay en esa iglesia. Ante la resistencia suscitada y las amenazas de cisma, la asamblea general de la iglesia de Escocia ha decidido crear una comisión que estudie el tema y presente sus conclusiones en 2011. Mientras tanto, ningún otro gay podrá ser ordenado pastor.
La medida trata de acallar las críticas del sector más conservador. La asamblea desea que por el momento este tema sea discutido internamente, habiéndose pedido a sus miembros que se abstengan mientras tanto de hacer declaraciones sobe el asunto o de mantener el debate abierto a la opinión pública. La «moratoria» mínima de dos años para ordenar pastores gays no afectará sin embargo a Rennie, que en principio podrá incorporarse a su parroquia de Queen’s Cross en Aberdeen. Rennie cuenta, de hecho, con el apoyo mayoritario de su congregación.